Inicio de la temporada 2019-20, el Depor no sabría que sería la última en Segunda. Un recién llegado Gaku Shibasaki recuperaba un balón, se lo daba en profundidad a Borja Valle, este disparaba, paraba Alfonso Herrero y Mamadou, Koné otro de los nuevos, se lanzaba a por el rechace y marcaba. Corría el min.19, pero el árbitro indicaba fuera de juego. Una celebración en diferido, cortada por el trencilla y, tras revisión del VAR, finalmente tanto concedido. Ese día el Depor ganaría 3-2 al Real Oviedo en su debut.

Cuatro temporadas después regresa el videoarbitraje a Riazor, una tecnología que llegó para ayudar en la labor de los colegiados, minimizar los errores humanos y tratar de traer más justicia al fútbol.

Con defensores y detractores, la Premier se planteó quitarlo, una iniciativa que nació de del Wolverhampton Wanderers. Entre sus quejas que, el chequeo tras el gol, está acabando con “la pasión espontánea que hace que el fútbol sea tan especial”, referida a la comprobación de aquellos tantos más polémicos.

Además, para ellos los errores suponen que el ambiente en el fútbol sea “mucho más hostil, con protestas y abucheos al himno de la Premier y cánticos contra el VAR”. Finalmente, el 6 de junio se votó y el videoarbitraje se mantendrá en las islas británicas, pero con retoques. Entre los puntos, además de menos demora en la toma de decisiones, se incluye la realización de una campaña de comunicación del VAR para aficionados y partes interesadas, que buscará aclarar aún más el papel del mismo en el juego a los participantes y aficionados.

En dxt también hemos querido hablar con un experto, ahora que el videoarbitraje retorna al estadio herculino y de la mano de Xabier Rodríguez Campos, árbitro de fútbol, autor del libro ‘Arbi, ¿qué pitas?’ y profesor de los cursos de árbitro de la Federación Gallega, tratamos de arrojar luz sobre un sistema que siempre ha estado rodeado de cierta controversia, pero que el trencilla defiende. “El VAR es bueno, en Primera Federación había cosas que habría solucionado. La gente este año decía ‘si hubiese habido VAR eso no habría pasado. Los aficionados del fútbol profesional parece que lo rechazan, pero los de la Primera Federación lo añoramos”, comenta Rodríguez.

Para él, tiene cosas “muy buenas”. “Ha eliminado errores flagrantes, cosas que ahora parecen del pasado. Todos recordamos que Maradona marcó un gol con una mano, España cae eliminada en el Mundial contra Corea en 2002, tras indicar que un balón, que acabó en gol, había salido”, relata.

Considera, además, que gracias a él se ha puesto fin a “las grandes simulaciones y al piscinazo de escándalo”. Por último, advierte de que “ha terminado con las agresiones a espaldas del árbitro. El jugador que podía aprovechar un momento para dar un codazo acaba ahora por ser cazado”.

Habla, además, del fuera de juego semiautomático, previsto en Primera, pero que no es seguro que lo haya en Segunda. “Lo vimos en la Supercopa, más allá del simple trazado de líneas, dicen que tiene una efectividad el 99%. Es mucho mejor que sea algo objetivo, aunque a veces duela que sea fuera de juego la uña del dedo gordo”.

Reconoce, no obstante, que a veces el VAR genera como aficionado que “esos tres minutos que no sabe si celebrarlo o no (un gol) mata un poco el espectáculo”.

Y habla también de cuando no hay acuerdo . “Hay un 5% de las veces en las que hay un árbitro hiperprofesional en la sala VOR y le pide que revise esa jugada al árbitro del campo y ese sigue con la decisión inicial. Hay jugadas que dependen de la percepción y la interpretación y hay jugadas muy al límite”, relata el trencilla sobre como funciona el VAR, ¿héroe o villano del fútbol?