“Uno nunca deja de ser deportista”, afirma convencido el excopiloto de rallies Luis Rodríguez Moya, que se retiró en 2002 y que no ha parado desde que se bajó del coche de competición. Una prolífica carrera deportiva, de la que se siente satisfecho y que rememora con cariño. “Estoy superorgulloso de lo conseguido. Llevaba 20 años, 15 disputando el Mundial de rallies, posiblemente la mejor época de mi vida. El deporte no triunfaba como ahora. Cuando Carlos (Sainz) y yo ganamos no había tantos ganadores en España. Estaban Manolo Santana, Orantes, Ángel Nieto, Fernández Ochoa... pero no había tantos y teníamos mucho tirón. Me siento muy reconocido, tanto ahora como entonces”, comenta Luis, que habla rápido, recordando esa cadencia que tenía que emplear en el habitáculo junto a Carlos Sainz, del que se deshace en elogios.
“Es un amigo y con él aprendí mucho. A un deportista de élite se le presupone el talento, pero puede no tener una gran capacidad de trabajo y Carlos tenía ambas. Hay que trabajar mucho, el fracaso solo viene cuando dejas de esforzarte. A veces el rival te gana porque lo ha hecho mejor, pero no es lo mismo perder. Puedes perder porque no haces los deberes, o puede ganarte el rival”, matiza.
Paró de competir, pero él no se detuvo y siguió ligado al deporte del motor de diferentes maneras, lo que le hizo ser consciente de otros enfoques. “Hice diferentes cosas. Fui director deportivo en Subaru al dejar la competición como copiloto, eché una mano al RACC de Cataluña cuando me lo pedían... Cuando competía todo se basaba en ir dentro del coche y cuando eres director deportivo percibes cosas que no ves cuando estás metido en la competición. Ves que las cosas tienen una explicación, las percibes desde otro punto de vista”, aclara.
También formó parte como adjunto en la junta directiva de la Federación Española de Automovilismo: “Ves que legislar no es fácil. Y a veces los deportistas no nos damos cuenta de eso”. Incluso organizó el Rally de Jordania, en el que se valió de su experiencia y notó que “como organizador hay cuestiones que no valoras cuando estás de copiloto. En definitiva, cuando tocas distintos palos ello te da una visión más amplia y valoras todo”, completa.
Y por supuesto sigue ligado al deporte como práctica habitual, tanto él como su familia. “Mi mujer estuvo becada para jugar al tenis en Estados Unidos, ganó el Campeonato de España de veteranos... El deporte es algo que me encanta, tengo 64 años y me hace sentirme muy bien. Entreno por la mañana (bicicleta, pesas, elíptica) y por la tarde hago sobre 2.500 metros de natación cada día”, afirma.
“El deporte ordena la cabeza, ayuda a tomar las decisiones mejor. Siempre digo que no soluciona los problemas, pero ayuda a afrontarlos y muchas veces a verlos de otra manera”, aclara Moya. Califica España como “una auténtica potencia mundial en el deporte. Tenemos campeones como Marc Márquez, Carolina Marín...El deporte ha subido mucho en España y yo le transmito a mis hijos que es fundamental para una vida sana y para comer más equilibrado”, comenta.
Reconoce que antes no se practicaba tanto. “No era tan habitual cuando era pequeño. Aunque estudié en los Jesuitas de Coruña y teníamos unas muy buenas instalaciones no se hacía deporte como ahora. Hoy en día hay un gimnasio en cada esquina.”
Los años como copiloto no le han hecho cogerle manía al coche y admite que le gusta mucho conducir. “Disfruto mucho. Vivo en Barcelona, pero tengo casa en Coruña y cada verano me hago los 1.100 kilómetros conduciendo y me encanta. Además, soy embajador de Volkswagen desde 2013 y tenemos unos cursos de conducción segura y para salvar situaciones de riesgo”, expone. Considera que en España “no somos aún el referente a nivel mundial en seguridad vial, pero vamos a mejor” y señala lo que menos le gusta de cómo conducimos. “La distancia de seguridad, lo de pegarnos al coche de delante no lo hacemos bien. Y si dejas un espacio con el de delante te dicen ‘acércate, que se te van a colar’ ¿Por qué hacemos esto en el coche y no lo hacemos en la cola del súper? Ahí dejas distancia y no te cuelas, pero en el coche tenemos esa costumbre y es arriesgada. Los accidentes por alcance son frecuentes. A veces en el coche nos transformamos y somos más agresivos”, zanja.
Una vida sobre ruedas |
Luis Rodríguez Moya (A Coruña, 1960) es un excopiloto de rally y uno de los más laureados de la historia. Fue galardonado con la Medalla de Oro de la Real Orden del Mérito Deportivo, otorgada por el Consejo Superior de Deportes en el año 1994.
Fue director deportivo del equipo Subaru, con el que conseguiría un Mundial de Pilotos con el noruego Petter Solberg en 2003. Recientemente fue capitán y embajador del equipo español en el FIA Motosport Games, donde la selección nacional fue primera, con 18 medallas. |