Con la temporada en marcha y tres derrotas en tres jornadas de la Liga Iberdrola, el CRAT A Coruña escenificó el cambio generacional en la presentación oficial del equipo en la sede de su patrocinador principal, la Residencia Rialta. De las diez jugadores que asistieron al acto, seis son nuevas, una transición que se nota en el campo y en el vestuario, pero que no preocupa en el club, al menos de puertas para fuera.
“La temporada pasada fue excelente y esta lo va a ser también. Estamos en la fase final de la Copa de la Reina y aspiramos a ganarla. Es verdad que no hemos empezado muy bien la liga, pero el formato de competición es especial y aspiramos a estar en los playoffs por el título. Vamos a mejorar seguro y a luchar por esos puestos que nos permitirán jugar las eliminatorias”, proclama el presidente del CRAT, Aurelio de Tena.
Humberto Ramírez, director deportivo del club, respaldó el discurso del presidente y pide tiempo para la adaptación de las nuevas jugadoras: “Son muy jóvenes y se tienen que adaptar a la categoría, pero confiamos en ellas. Son el futuro del club”.
De Tena y Ramírez, que señala como “un paso importante en varios aspectos” el acuerdo con CrossFit Coruña y Clínica Arriaza para implementar la preparación física y los cuidados de las jugadoras, estuvieron acompañadas por los entrenadores Juan Pablo Chorny y Pablo Artime y una decena de jugadoras: las veteranas Ali, Divi y Maica, la portuguesa Inês, que cumple su segunda temporada en el club, y seis caras nuevas, la neerlandesa Hannah, la colombiana Cata, Sofía, Idaira, Vicky y Carla.
Alicia reconoce que el inicio de la Liga Iberdrola no es el deseado y destaca la importancia de ajustar las piezas del puzzle: “Tenemos un parón para recuperarnos física y anímicamente y para proyectar las próximas jornadas, que van a ser una guerra porque los equipos que vienen [Getxo y Cocos] están en una situación similar a la nuestra”.
La veterana delantera del CRAT asume el rol de veterana: “Es fundamental y bonito. Nosotras fuimos novatas y ahora tenemos que liderar el barco con el ejemplo, pero también acoger y acompañar a las nuevas en la transición a la División de Honor desde la empatía y el compañerismo”, zanja.