Los árbitros no juegan partidos pero hay algunos que se han quedado en el infausto recuerdo de la historia del Deportivo como verdaderos ‘culpables’ de los males blanquiazules.
Este mediodía el conjunto herculino se reencontrará con Ais Reig, el trencilla que dejó a los coruñeses con nueve ante el Córdoba, en la campaña 2018-19, en un duelo que los deportivistas acabaron perdiendo dos puntos en el añadido.
El colegiado alicantino, que cumple su décima temporada en Segunda, le ha pitado al Dépor en un total de cuatro ocasiones, dos veces en la campaña 2018-19 y otras dos en la 2019-20, con un balance de una victoria, una derrota y dos empates. Además, ha mostrado ocho amarillas y dos rojas a los coruñeses.
¿Qué pasó en aquel partido en el Nuevo Arcángel cuyos ecos aún colean entre la parroquia blanquiazul? En la temporada 2018-19, en Segunda y bajo las órdenes de Natxo González, el Deportivo visitaba el 20 de octubre el campo cordobés y el trencilla Ais Reig desquiciaba a los coruñeses. El Dépor se adelantaba en el minuto tres de la contienda por medio de Quique González, pero el partido se le complicaba a los coruñeses, que se quedaban con nueve, tras sendas expulsiones de Pablo Marí y Borja Valle, además de la del técnico.
El zaguero recibía la segunda amarilla, tras una jugada dudosa, por una mano que la repetición no aclaraba. Apenas cinco minutos después Valle veía la roja directa, tras irse al suelo y responder a las provocaciones del trencilla que le decía “levántate, que eres un teatrero”. Lo hacía llamándole “sinvergüenza”, como así recogería en el acta de Reig. También abandonaría antes el campo Natxo González, al que expulsaría por las protestas en esa acción. Para terminar de redondear en el mal sentido la tarde, el Dépor acabaría dejándose dos puntos en ese partido, pues en el último minuto del añadido Andrés Martín lograría igualar el choque para los verdiblancos.
La polémica con el árbitro no terminaría ahí, pues según el delantero berciano faltaba a la verdad en el acta al poner en su boca una descalificación hacia su persona que él no había proferido.
Según el colegiado, el atacante le dijo “eres un sinvergüenza de mierda” tanto antes de que le mostrara la cartulina, como mientras abandonaba el campo. En ese momento nadie en el seno del equipo quiso pronunciarse sobre lo ocurrido, pero en sala de prensa, en el postpartido, Natxo González se mostró molesto con lo que había ocurrido.
“Ni nos podemos defender de nada, nos tenemos que callar, por lo tanto nos la tenemos que tragar, nos la tenemos que comer y es más de lo mismo. No puedo defenderme porque si quisiera defenderme tendría que decir cosas que me iban a perjudicar a mí y no quiero porque ya me siento bastante perjudicado”, comentaba entonces el míster. Asimismo, se aventuró a temerse que el árbitro reflejase algo que no se ajustase a la verdad en su posterior informe tras el encuentro: “Ya leeréis el acta, pondrá lo que quiera poner y tú no puedes tener ninguna defensa”.
No acabaron ahí las quejas contra Ais Reig. El representante de Valle, Rodrigo Fernández Lovelle, le acusó de “mentir” en un comunicado que su empresa, Protio Sport SL, publicó en las redes sociales: “Soy agente de jugadores y llevo vinculado al fútbol más de veinticinco años, y tengo cincuenta y me da pena y me entristece que alguien mienta en el acta, no se puede jugar con la gente y mentir. Al final a Borja Valle, jugador del Deportivo, le sancionarán varios partidos por algo que no ha dicho, pero lo que tiene validez es lo que dice el árbitro, aunque mienta (...). Invito a todos a que vean las imágenes y cada uno que saque su propia conclusión. Quien conozca al jugador del Deportivo sabe cómo es y nunca reaccionaría así en un campo. No me gustan las injusticias y menos que se juegue con la gente. Al final, por decisiones arbitrales, el Deportivo ya perdió dos puntos. Luchemos por la justicia y por la verdad. Me indigna la mentira”, sentenciaba.
Pero este episodio con el Dépor no es el único que ha protagonizado. Tampoco le guardan especial cariño en el Eldense, que en el año 2011 impugnó el acta arbitral tras el encuentro contra La Nucía. Tras ese choque, en el que los de Elda perdieron por 1-2, el club preparó un documento para acudir a los juzgados y denunciar al trencilla por “mentir a la hora de redactar el acta del partido y abuso de poder”.
Además de indicar que esta no se ajustaba a la realidad, aseguró que se inventó sendas expulsiones de Álvaro y Giuseppe y que “lo que hizo fue amenazar a los jugadores”.
Cinco años después, durante un partido entre el Mirandés y el Cádiz, expulsó al exblanquiazul Gorka Santamaría por perder tiempo al retrasar la puesta en juego del balón, según el acta. La versión de los futbolistas del plantel andaluz y del técnico Álvaro Cervera fue que el trencilla amonestó al futbolista por beber agua en la banda. Algo que hicieron también jugadores del club burgalés y que, sin embargo, no fueron castigados.