Riazor ha disfrutado en contadas ocasiones del honor de ejercer de casa de la selección española absoluta masculina. Una de las más recordadas, puesto que fue la única ocasión en que dos deportivistas formaron de inicio con La Roja en el recinto coruñés, tuvo lugar hace hoy exactamente 30 años.

El calendario internacional actual todavía es ciencia-ficción en 1995. La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) acuerdan disputar un amistoso internacional a mediados de enero. Un partido entre una selección europea y una sudamericana, cuando en el Cono Sur es verano y los campeonatos locales están detenidos. Quizá el motivo radique en la negativa de la RFEF a la invitación de la Conmebol para participar en la Copa América de 1995, a celebrarse precisamente en Uruguay.

Más ‘expedientes X’. El combinado charrúa afronta su segundo encuentro desde el mes de agosto. En todo el último tercio de 1994, Uruguay únicamente juega un partido amistoso, en Lima ante Perú, a la que bate por 0-1, el 19 de octubre de 1994. Ese encuentro precisamente es el primero que dirige como seleccionador Héctor Núñez, nombrado el 5 de agosto de 1994, que vuelve a sus orígenes en esta visita a A Coruña, ya que su padre es natural de Meicende y su madre, de Pastoriza. “Aquí tengo muchos amigos y me siento como en mi propia casa”, asegura el ‘Pichón’ Núñez, conocido así durante su carrera futbolística con paradas en Valencia (1959-1965), Mallorca (1965-1966) y Levante (1966-1968).

La expedición uruguaya aterriza en Alvedro el domingo 15 de enero. El equipo celeste lleva varias semanas de entrenamientos con 23 futbolistas. La semana antes de visitar Riazor se prueba en un amistoso contra una selección de la provincia de San José, a la que bate por 6-1. Núñez descarta a cinco futbolistas. Además, no puede contar con Rubén Sosa, delantero del Inter de Milán, con una lesión de rodilla. Sí confía en un Daniel Fonseca recién fichado por la Roma tras romperla en el Nápoles y en un Enzo Francescoli que acaba de regresar a River Plate tras ocho temporadas en Europa con Racing de París, Marsella, Cagliari y Torino. Otra de sus apuestas es Gustavo Poyet, campeón de la Copa del Rey con el Zaragoza, que apenas goza de oportunidades con seleccionadores anteriores.

Fran, un año después
Un día más tarde, el lunes 16 de enero, llega la España de Javier Clemente con solo solo 17 futbolistas, después de la disputa de la 17ª jornada liguera, en la que Deportivo y Real Madrid, tercero y primer clasificados, empatan sin goles en Riazor. El seleccionador no cubre la baja del lesionado Albert Ferrer, inicialmente convocado. El deportivista Julio Salinas, el atlético Caminero y el valencianista Camarasa son baja con respecto a la anterior citación. Tres deportivistas, Voro, Donato y Fran, entran la convocatoria. El ‘10’ regresa al combinado nacional después de un año de ausencia, ya que Clemente no cuenta con él para llevárselo entre los 22 del Mundial de Estados Unidos. Su última presencia data del 9 de febrero de 1994, un amistoso ante Polonia (1-1) en Tenerife.

El Real Madrid domina la lista española con cinco jugadores: Cañizares, Hierro, Alkorta, Amavisca y Luis Enrique. El seleccionador, pese a la insistencia de la prensa capitalina, se resiste a dar la alternativa a Raúl González, el gran debate al que se enfrenta el técnico de Barakaldo junto a las recurrentes ausencias de Fran.

Y si Fran no va al Mundial de 1994, Uruguay tampoco. El rival de España es la víctima de la explosión de la Bolivia del español Xabier Azkargorta, que deja fuera del torneo a la bicampeona mundial. El grupo B de las eliminatorias sudamericanas lo encabeza la Brasil de Bebeto y Mauro Silva, con el equipo andino, segundo, también clasificado para la fase final. Uruguay, tercera, se pierde un Mundial por primera vez desde España 82.

Sin embargo, el seleccionado charrúa prepara a conciencia un objetivo. El torneo de selecciones más antiguo del planeta se disputa en suelo uruguayo en solo seis meses. Héctor Núñez lo tiene claro. “Estamos recorriendo lentamente el camino hacia la Copa América de 1995, en la que esperamos desempeñar un buen papel como anfitriones”, afirma el seleccionador.

La selección española se ve obligada a suspender el entrenamiento previo en Riazor, el día antes del encuentro, después de media hora de sesión debido al mal tiempo. Lluvia y frío, nada extraño por estos lares a mediados de enero. 

El encuentro se disputa el miércoles 18 de enero de 1995, con pitido inicial a las 20.30 horas. Riazor presenta un aspecto desangelado. Solo General –cuya entrada cuesta 500 pesetas– se abarrota. Los precios del resto de localidades van desde las 3.000 pesetas de Tribuna Superior hasta las 200 de Especial Niños.

Los poco más de 10.000 aficionados presentes soportan estoicamente el frío y la humedad, aunque afortunadamente no llueve. Y además, presencian un hecho único, como ver a dos deportivistas jugando de inicio en Riazor con la selección española. Clemente apuesta por Fran y Donato y una modificación en su esquema habitual. El hispano-brasileño actúa como pivote entre una defensa de cuatro hombres y otra línea de cuatro volantes, con Fran y Guerrero por dentro y Goikoetxea y Sergi en las bandas.

Héctor Núñez saca al tapete coruñés el once esperado, en el que hace debutar a dos defensas: el lateral derecho Alzueta y el central Aguirregaray, que se ciñe la celeste por primera vez a los 35 años. Más adelante efectúa su debut internacional un jugador excepcionalmente hábil, Álvaro ‘Chino’ Recoba.

Cuatro goles
Apenas han transcurrido 100 segundos de partido cuando Pizzi se lleva la pelota a trompicones entre tres rivales y bate a Arbiza en el mano a mano. Es el primer gol con La Roja del delantero argentino nacionalizado.

Antes del ecuador del primer acto, empata Uruguay. Balón largo de Bengoechea para la carrera de Fonseca, que gana en velocidad a Abelardo y, aprovechando el bote, lo toca suavemente por encima de la salida de Zubizarreta.

Un nuevo error de Abelardo, que en su intento de pase a Hierro regala la pelota a Francescoli, acaba en el 1-2. El genio charrúa conecta, con un fantástico pase de exterior, con Bengoechea, que supera de nuevo a Zubizarreta, aunque el capitán español llega a rozar el cuero.

Clemente realiza cinco cambios en el descanso y rehace su habitual 4-2-3-1. Nadal ocupa el centro de la defensa, adelantándose Hierro para formar un doble pivote con Donato. Luis Enrique y Amavisca ocupan los extremos, con Fran en la mediapunta. En punta, debuta Losada, el díscolo canterano madridista que disfruta del mejor momento de su carrera en el Celta.

España, y la afición coruñesa, encuentran el premio del empate en el tramo final tras muchos minutos de empuje. Centro de Fran desde la izquierda y espectacular volea de Donato llegando desde atrás y adelantándose a Paolo Montero. Es el tercer gol de Donato con España en su tercer partido internacional.
Solo seis meses después, Uruguay –que jamás ha ganado a España: 5 empates y 5 derrotas– levanta su decimocuarta Copa América. De los 18 de Riazor, diez se proclaman campeones continentales. ¿Y España? Sigue prescindiendo de Fran –“lanzó los córners muy bajos”, destaca Clemente tras el 2-2 de Riazor– y, como casi siempre hasta entonces, cae en cuartos de final de la Eurocopa. 

Ante medio millar de aficionados
El entrenamiento de Uruguay en el García Hermanos, todo un acontecimiento en Betanzos

El césped del García Hermanos luce sus mejores galas en unos tiempos en los que el equipo de la localidad llega a pelear por subir a Segunda B y en verano los mejores equipos del mundo se pelean por disponer de él para preparar sus partidos en el Teresa Herrera.

La selección uruguaya lleva su entrenamiento del lunes 16 de enero al recinto betanceiro. La sesión resulta todo un acontecimiento en la capital brigantina. Medio millar de vecinos se acercan al recinto, inaugurado pocos años antes, en 1991, para sustituir al vetusto campo de O Carregal.

Los niños del cercano colegio Vales Villamarín no pierden la oportunidad de fotografiarse y de conseguir los autógrafos. Los más demandados fueron Francescoli, Fonseca y Poyet.