Todos los calificativos que se le puedan poner a la afición blanquiazul se quedan cortos en esta campaña, en la que Riazor ha maravillado con un récord de afluencia que sitúa al feudo herculino en el ‘top ten’ de los estadios con más asistencia de media a nivel nacional. 23.379 espectadores promedio, contando sólo los partidos de campaña regular (un 71,5%) y 23.019 (un 70,4%), si tenemos en cuenta el duelo de ida de la Final de Campeones, disputado este pasado miércoles contra el Castellón.

Un ránking de estadios con mayor media de hinchas que lidera el del Real Madrid, campeón de Liga, con un Santiago Bernabéu con más de 72.000 por partido, con un promedio de 88,9%. Los números de los coruñeses, aunque más discretos, ya que la afluencia de Riazor es menor que la del feudo blanco (actualmente 32.660), sólo están por detrás de los del Atlético, Betis, Athletic, Valencia, Barcelona (que jugó este año en el Lluís Companys, por las obras en el Camp Nou), Sevilla, Real Sociedad y el noveno, , la UD Las Palmas, con un total de 25.176 aficionados de media.

El Celta, por debajo

Los coruñeses están, además, con mejores números que otros equipos de Primera, como Osasuna (19.703) o Celta de Vigo, con 20.039 de promedio. Y unos registros que están por encima de otros ‘Primeras’ como Cádiz, Villarreal, Mallorca, Granada, Rayo Vallecano o Girona. 

Pero es que, además, el Depor ha mejorado sus propios números, empezando ya por el número de abonados. Este curso, el club tuvo que cerrar antes la campaña de socios, con un toral de 28.346, una cantidad con la que superaba las campañas 2000-01, 2001-02, 2002-03 y 2003-04, todas en Primera División y en Liga de Campeones. De hecho, ahora mismo hay una lista de espera de miles de seguidores de cara a que se abra la nueva campaña de abonados, que promete volver a batir marcas y más ahora que el equipo regresa a Segunda división, después de cuatro años fuera del fútbol profesional, en Primera Federación.

Tercera mejor marca

Desde que hay registros oficiales a través de los tornos de acceso, en 2005, el récord de asistencia media, a pesar de los increíbles registros de este curso, lo sigue ostentando la temporada 2014-15. Con Víctor Sánchez del Amo como técnico, fue la de la salvación en la última jornada en el Camp Nou, con 23.864 aficionados promedio en Riazor.

A continuación, la campaña 2015-16, segunda consecutiva en la máxima categoría del fútbol español, con 23.797 y la tercera se cuela ya esta temporada, con 23.379, si tenemos en cuenta sólo los duelos del curso liguero.

Cuarta es la 2016-17, la tercera seguida en Primera, con Gaizka Garitano y Pepe Mel como inquilinos en el banquillo, con 22.651; y la 2014-15, primera tras el segundo ascenso, con 21.254. 

A continuación, ya se encuentran la última temporada en la división de honor y el curso actual. Esta campaña tan sólo ha habido cinco partidos en los que la entrada ha sido inferior a 20.000 espectadores: el choque ante SD Logroñés (18.557), Osasuna Promesas (16.637), con el Depor décimo antes del partido, con 18 puntos, a nueve del entonces líder, la Cultural Leonesa, el Sestao (17.950), Real Sociedad B (19.715) y el partido de ida de la Final de Campeones contra el Castellón, con el mal horario de las 21 horas en miércoles (16.176).

En el resto de enfrentamientos siempre se superaron los 20.000 espectadores y el récord fueron los 31.833 del encuentro contra el Barça Atlètic, choque en el que el Depor certificaría el ascenso a Segunda, a falta de dos jornadas. Ese número de hinchas en las gradas de Riazor supuso, además, un récord de asistencia en Primera Federación. 

Unos números a los que había que añadir los 10.000 que estuvieron en la explanada del Palacio de los Deportes de Riazor, disfrutando de la fan zone instalada por el club blanquiazul.

El anterior récord lo ostentaba el encuentro con la Cultural Leonesa en Riazor, con 29.079 espectadores.
Es más, el conjunto blanquiazul, según recoge la RFEF en su página web, “que ya consiguió batir todos los registros en fase regular el pasado 4 de marzo (con los 28.112 espectadores contra el CD Lugo), ostenta desde esta 33ª jornada el récord absoluto entre los 1426 partidos disputados durante estas tres campañas”.

Hasta el choque contra el cuadro lucense, la ida de las semifinales de playoff de ascenso entre Depor y Castellón del curso 2022-23 había sido el de mayor afluencia (28.828).

De récord en récord ha ido saltando el Depor y, si echamos la vista atrás, los números sólo han ido a más, al contrario que como era la trayectoria del equipo. En la temporada 2018-19, la del no ascenso a Primera en Mallorca, el promedio fue de 17.656 aficionados. 

No obstante, en este curso hay que tener en cuenta los cierres parciales en diferentes gradas que sufrió el estadio debido a las obras de reforma de la cubierta del mismo.

La campaña siguiente, la del descenso a Segunda B, la ahora llamada Primera Federación, la media de afluencia se quedó en 17.476 espectadores en los 15 partidos con público antes del estallido de la pandemia de coronavirus.

El curso 2020-21 se desarrolló en su totalidad a puerta cerrada o con aforo limitado debido a las restricciones sanitarias, que obligaban a cerrar las gradas y a establecer una separación entre seguidores de varios asientos y teniendo que portar los mismos mascarilla. 

La siguiente, la 2021-22, cayó a la cifra más baja desde que hay registros: 14.404 hinchas por encuentro en 17 partidos, con Riazor ya abierto en su totalidad. La pasada campaña, la asistencia media subió hasta los 19.532 aficionados por choque. 

Por último, no existen registros de la 2011-12, la que vio al Deportivo por primera vez en Segunda, tras dos décadas en la élite. Ahora el Depor cierra un ‘top ten’ nacional, supera a muchos ‘Primeras’ y parece no tener techo.