Riazor sigue siendo un estadio de Primera, también en Segunda División. El campo coruñés no afloja su alto ritmo de asistencia, a pesar de que el Deportivo solo ha ganado dos partidos en su feudo: ante el Racing de Ferrol y el último en casa, contra el Eibar.
En estos primeros siete encuentros que ha jugado el Dépor en Riazor la media es de de 22.974,7 espectadores, por los 23.379 del curso pasado. Unos registros que, teniendo en cuenta la afluencia actual, seguro que se van a superar.
De momento, la jornada de mayor asistencia fue el choque contra el Racing de Ferrol (26.455) y el partido en el que menos aficionados acudieron fue el del Eibar (20.156).
Unos números muy buenos, si tenemos en cuenta que este encuentro se jugó el lunes 11, a las 20.30 horas, mal horario para aquellos seguidores que salían de trabajar para los niños.
Este domingo, con la visita del Sporting de Gijón y tras anunciar el club que no quedaban localidades a la venta, Riazor apunta a rozar o incluso a alcanzar el primer lleno de la temporada. A la fiel hinchada blanquiazul, que no falla a la cita con su templo, hay que añadir la importante presencia de la Mareona.
Aunque el Deportivo solo puso a disposición de la afición asturiana 536 entradas, se espera que alrededor de 2.000 hinchas gijoneses estén presentes en el campo coruñés. Otro masivo desplazamiento de los seguidores rivales, tras los anteriores vividos con Racing de Santander y Málaga. Este encuentro, como los dos citados, ha sido catalogado como partido de alto riesgo.
Un choque de alto voltaje, entre dos históricos de la élite, que ahora se citan en Segunda y que contarán con el incomparable marco de un Riazor, que en lo que llevamos de campaña no ha bajado nunca de los 20.000 espectadores. Unos guarismos muy buenos para un estadio que registra grandes entradas, que en muchas ocasiones superan a campos de Primera División.
Estos datos contrastan con los del curso pasado, cuando por estas fechas, con más frío, hubo un bajón. El 29 de octubre, en la victoria por la mínima ante el Nàstic de Tarragona, hubo 20.063 aficionados en las gradas.
A estas alturas, en la campaña anterior, hubo incluso días en los que en Riazor tuvo aforos inferiores a los 20.000. Ocurrió en la jornada 12, el 11 de noviembre. El Dépor se impuso a la SD Logroñés ante 18.557 espectadores. Menos incluso siguieron quince días después el empate contra Osasuna Promesas (16.637). El 10 de diciembre en el triunfo contra el Sestao el aforo se quedó en 17.950. El Dépor comenzó el año 2024 el 4 de enero contra la Real Sociedad B, arropado por 19.715 seguidores.Entonces el equipo entrenado por Imanol Idiakez era sexto, con 29 puntos, a nueve de un Celta Fortuna que era líder con 38 en su casillero.
Tras la derrota contra la Cultural en el Reino de León llegaría la racha de imbatibilidad del Dépor durante 19 jornadas (16 triunfos y tres empates) y desde ese momento la afluencia nunca sería inferior a los 21.000. El día del ascenso, ante el Barça Atlètic, se batieron todos los récords de la categoría, con 31.833 espectadores. El duelo de ida de la Final de Campeones, ante el Castellón, fuera del curso regular, solo hubo 16.176 hinchas, ya con nada en juego.
Estos registros le valieron a Riazor para colarse en el ‘top-10’ de estadios la campaña pasada, con 23.379 espectadores de media, un 71,5% del aforo. Una clasificación que lideró el Real Madrid, que fue campeón liguero, con un Santiago Bernabéu, con más de 72.000 por partido, con un promedio de 88,9%. Los números de los coruñeses solo estuvieron por detrás de los del Atlético, Betis, Athletic, Valencia, Barcelona (que juega en el Lluís Companys, por las obras en el Camp Nou), Sevilla, Real Sociedad y la UD Las Palmas, con un total de 25.176 aficionados de media. Asimismo, el Dépor se situó por delante de otros equipos de Primera, como Osasuna (19.703) o Celta de Vigo, con 20.039 de promedio.
Esta temporada los números están superando con creces los del curso anterior y la hinchada herculina no falla. No lo hizo a pesar de que solo ha celebrado dos triunfos, contra el Racing de Ferrol, en la tercera jornada, el pasado 1 de septiembre y el último, el 11 de noviembre, contra el Eibar. El resto de la hoja de servicios de los blanquiazules se completa con tres derrotas (Oviedo, Burgos y Racing de Santander) y sendos empates, con Málaga y Eldense.
Además, los hinchas coruñeses solo han cantado dos goles a favor. Nada de eso importa cuando acudir a Riazor es como una religión para los deportivistas y ni el mal tiempo, el frío, la lluvia o los horarios pueden con los irreductibles blanquiazules.
El club cuenta este año con 29.433 socios (cifra en la que se incluye el socio amigo y nen@ Dépor, pero no mascotas), por los 28.975 de la temporada pasada.
Un éxito de poder de convocatoria de la campaña de abonos en la que, debido a las masivas peticiones, el Deportivo se vio en la obligación de habilitar una lista de espera.
Por el momento, el encuentro ante el Eibar había sido el choque con el horario más tardío, a las 20.30 horas.
Llegarán en la recta final de diciembre dos encuentros en la misma semana en Riazor, antes del parón navideño, con horarios de noche. Estas dos jornadas pondrán a prueba la capacidad de la hinchada para hacer malabares entre el trabajo, las obligaciones familiares y las tradicionales cenas de empresa y de Navidad.
Con dos partidos en la antepenúltima semana de diciembre, el Dépor se enfrentará el jueves 19 a las 21.15 horas al Castellón y tres días después, el domingo 22 a las 21 horas al Mirandés.
Horarios complicados, en fechas señaladas en los que puede haber una pequeña bajada de afluencia, más por circunstancias que por merma en el apoyo de la hinchada.Porque Riazor este año apunta a batir sus propios récords, el primero, el domingo ante el Sporting de Gijón.