Mucho antes de la Ciudad Deportiva de A Torre, en las inmediaciones del milenario faro ya se jugaba al fútbol. Justo al lado de la actual instalación rebautizada en homenaje a Arsenio Iglesias abrió sus puertas, en los estertores de los años 20, el campo de San Amaro.
El Emden, club formado poco después de la desaparición del Real Club Coruña hace algo más de cien años, hereda el campo de Monelos. La nueva entidad abandona el terreno del antiguo ayuntamiento de Oza en 1929. El club emdista juega en Betanzos durante un breve periodo de tiempo antes de poder disponer de un nuevo recinto propio. Ese terreno se encuentra entre la playa de San Amaro y la Torre de Hércules, en la zona conocida como Agra de San Amaro. A lo largo de los años, el Campo de San Amaro también es mencionado en los medios locales como Campo de la Carretera de La Torre, Campo de Marineda, Campo de Hércules o Campo del Coruña.
La inauguración tiene lugar el 3 de noviembre de 1929. El Emden organiza un encuentro frente al Unión Sporting, club de la parroquia viguesa de Lavadores que desde su fundación en 1922 siempre compite en la Serie A del Campeonato de Galicia. El presidente de los Tomasinos, reverendo padre dominico Iruiñ, bendice la nueva instalación.
APERTURA
Emden y Unión Sporting de Vigo abren el campo el 3 de noviembre de 1929
El Campo de San Amaro inicia su existencia con una victoria por 3-0 del conjunto herculino. Y eso pese a que varios titulares de la formación emdista se plantan antes del partido, exigiendo un pago anticipado de ciertas cantidades prometidas por la directiva. En su lugar juegan varios reservas, lo que no disminuye el nivel del equipo coruñés. El futuro deportivista Triana marca el primer tanto antes del descanso. Otro futuro blanquiazul, Fuentes, anota en la segunda mitad dos goles, uno de penalti, para completar el marcador.
El Emden presenta la siguiente alineación en un día histórico: Lemus en la portería; Abelardo y Campos en defensa; Celerino, Fuentes y Basterrechea II en la medular; y Nito, Sánchez, Triana, Lelé y Pichichi en la delantera.
Durante el proceso de mudanza, el Emden cambia su nombre por Club Coruña, al considerarse heredero directo del desaparecido Real Club Coruña. El 16 de junio de 1930 recibe la autorización de la Federación Gallega de Fútbol para efectuar el trueque. También recupera los colores gualdinegros del antiguo enconado rival del Deportivo.
El campo de San Amaro acoge partidos de la Serie A regional, el Campeonato de Galicia de Primera División, y de Tercera División nacional. El Emden/Coruña milita en la máxima categoría del balompié gallego en las temporadas 1927-28 —tras proclamarse el curso anterior campeón de la Serie B—, 1928-29, 1929-30, 1930-31, 1934-35 —en la que queda tercero, en una edición en la que no participan ni Dépor, ni Racing de Ferrol, ni Celta—, 1935-36 —segundo, aunque tampoco juegan los tres—, 1936-37 y 1939-40).
En San Amaro, el Coruña derrota al Santiago para proclamarse campeón gallego de aficionados el 27 de abril de 1941, en la primera campaña tras la desaparición del Campeonato de Galicia. El equipo gualdinegro juega para subir a Segunda División en el ejercicio 1941-42, después de proclamarse campeón del grupo 1 de Tercera División. Se mide en un playoff a Cultural Leonesa, Real Valladolid, Racing de Santander, Racing de Ferrol y Langreano. Pese a jugar la Liga en San Amaro, los partidos de la promoción de ascenso los disputa en el Parque de Riazor, casa del Deportivo. Acaba con cuatro victorias y seis derrotas. El billete a la categoría de plata es para el conjunto leonés. El Coruña desaparece poco después, bajo la presidencia de Antonio Mariño.
El Coruña juega aquel último partido, el 5 de abril de 1942 en el Parque de Riazor frente al Racing de Santander (1-5), con el siguiente once: Salinas; Varela, Sardina; Castiñeiras, Magín, Juanito; Viso, Iglesias, Manolo Vázquez, Barón y Cagigao.
Con la desaparición del Club Coruña, el campo de San Amaro se convierte en uno de los terrenos de juego del fútbol modesto, cuya Liga y Copa celebran su primera edición en el curso 1940-41. La prensa local lamenta en diversas ocasiones la dificultad que entraña para los aficionados desplazarse hasta el campo. La inauguración de La Granja deja a un lado como terreno de los modestos a San Amaro, relegado a albergar principalmente partidos infantiles.
Sin embargo, el campo renace con la eclosión del Club Torre, que juega en San Amaro tras proclamarse campeón de la Primera División modesteril y ascender a la Serie A Regional en el curso 1945-46. Por el recinto de la futura Avenida de Hércules pasan, en la campaña 1946-47, clubes como Noia, Areal de Santiago, Bergantiños, Marino de Mera o Hércules de San Pedro. El equipo arlequinado se proclama campeón del grupo norte. En la final, con el título gallego de aficionados en juego, se mide al Turista vigués, aunque lo hace en Riazor.
El campo de la carretera de la Torre acoge, en enero de 1950, el campeonato de fútbol del Frente de Juventudes. La centuria ‘La Espina’ representa a la delegación coruñesa frente a equipos de Carral, Ribeira, Melide, Padrón, Ferrol y Pontedeume.
A comienzos de esa misma década, el baloncesto también se apodera San Amaro. La creación de torneos locales, como el Campeonato de Primavera, obliga a buscar canchas. La pista del Centro Deportivo de Santa Lucía, la del Liceo de Monelos, la del Sporting Club Casino... San Amaro también se suma. El deporte de la canasta, en aquellos tiempos, todavía se practica al aire libre. Fútbol y baloncesto comparten el campo de la Torre sobre todo en los años 50, con encuentros locales de categoría senior, nuevos torneos del Frente de Juventudes y, sobre todo, choques del campeonato coruñés de infantiles.
La Copa Verano de fútbol infantil, en junio y julio de 1971, es la última actividad deportiva en el campo de San Amaro de la que los medios se hacen eco. Desde mediados de los años 70, en la ubicación del antiguo campo se encuentran una chatarrería y un almacén de productos de construcción. También esa finca alberga durante muchos años un taller. El solar linda por el norte con el frontón y el campo de hockey de la Ciudad Deportiva de A Torre-Arsenio Iglesias y por el sur con la rotonda del Paseo Marítimo, que recibe el tráfico que sube desde Adormideras y que baja desde Orillamar y Avenida de Hércules.