Después de un tramo final de la temporada complicado, el Attica 21 Hotels OAR Coruña disputará, por tercera campaña seguida, la fase de ascenso a la División de Honor Plata después de vencer al Carballal (27-34). De nada le sirvió al Teucro su victoria ante el Calvo Xiria (25-26), ya que precisaban la derrota herculina para subir a la segunda plaza.

El conjunto herculino saltó con muchos nervios –propios por otra parte– al Municipal de Carballal. Fruto de esa sensación, los jugadores de Marcos Rodríguez cometían muchos errores en ataques y no estaban bien en defensa.

Por suerte, los locales tampoco estaban muy inspirados, en parte por la falta de puntería y en parte por las intervenciones de Iago Gómez.

Con todo, no podía parar todos los disparos, al contrario que el meta rival, Juan José Novas, que apenas dejó algún resquicio en su portería (4-2).

En ese momento, apareció Diego Martínez para asumir los galones en ataque y a base de cañonazos y pases milimétricos logró que su equipo encadenase un parcial de 0-5, para coger su primera gran renta del partido (6-9).

Sin embargo, el técnico local, Félix Antonio Mojón, paró el encuentro para que los suyos despertasen y jugasen como habían hecho en los primeros minutos del encuentro. Este toque de atención funcionó ya que el Carballal logró reducir la diferencia a un solo gol (11-12).

No obstante, los locales no contaban con la aparición salvadora de Matías Payá para sostener al conjunto herculino, durante más de diez minutos con sus goles. Gracias al chileno, el OAR se fue mandando al término del primer tiempo (14-15). Esto era crucial, ya que el Teucro ganaba en Carballo.

A por todas

Tras el paso por los vestuarios, el cuadro coruñés salió con su mejor versión para despejar cualquier duda de qué equipo iba a disputar la fase de ascenso a la segunda división.

Guiado por Mauro Jaureguiberry, hasta entonces muy errático, los oaristas lograron volver a ponerse tres tantos por delante en los primeros cinco minutos de la segunda mitad (15-18).

El Carballal, que salió muy dormido, sólo encontraba respuesta a través de los siete metros, que los colegiados pitaban con bastante frecuencia. A pesar de que fallaron algunos gracias a las paradas de Iago Gómez, lo cierto es que lograron acercarse a un solo gol de distancia (21-22).

Con todo, como ya había pasado en la primera mitad, emergieron dos figuras salvadoras. Una fue Diego Martínez y la otra fue Pablo Fernández. Ambos, desde la primera línea y el puesto de pivote, rompían la defensa local para desesperación del técnico rival.

A raíz de esa conexión, el partido cogió otro color, el rojo –jugó con la segunda equipación– del OAR. Pero justo cuando mejor estaban, un colegiado se lesionó y obligó a detener el encuentro durante diez minutos.

Aun así, esa situación no afectó a los herculinos, que volvieron con más energías y rápidamente lograron una distancia de siete goles que sería insalvable (27-34).

Con la victoria, el equipo coruñés disputará, del 17 al 19 de mayo, su tercera fase de ascenso consecutiva. Quien sabe si este año puede ir la vencida y lograr el ansiado ascenso.