El OAR Coruña sufrió muchísimo para deshacerse del Bueu, del que fue a remolque durante más de medio partido, y se jugará un puesto para la fase de ascenso en la última jornada, en la que visita al quinto clasificado, el Carballal, mientras que su rival por el billete, el Teucro B, que también las pasó canutas ayer para vencer al Gáldar (29-28), jugará en la pista del sexto, el Xiria.

Los de Marcos Rodríguez no se soltaron hasta la segunda mitad, tras una primera donde llegaron a ir cuatro goes por debajo en varias ocasiones.

La reacción llegó con un parcial de 5-0 que los colocó a rebufo (24-25). Poco después, con uno de 3-0, los locales le dieron la vuelta al marcador (28-27). Fue su primera ventaja del encuentro. 

Tras el 30-30 el duelo se calentó de más. Mauro y Suárez, y después Pablo Partínez y Bacelar, fueron excluidos por parejas. En medio de la bronca apareció el último fichaje oarista, Matías Payá, que con dianas seguidas elevó su cuenta a 10 y dio 3 de renta a los locales (35-32).

El Bueu no tiró la toalla, pero su último gol, de penalti, llegó con sólo 27 segundos por jugar. Al OAR le bastó con mover el balón y llevarlo hasta Pablo Martínez, cuyo fallo final no tuvo importancia alguna.