La selección española se proclamó campeona de Europa una vez más. Y van 19, las tres últimas de manera consecutiva. El combinado nacional, con el coruñés y liceísta César Carballeira en el cinco inicial, tumbó a Portugal en una final intensa y por momentos bronca, ante unas 1.500 personas en el mítico Olímpic de l’Ateneu, en Sant Sadurní d’Anoia.
España se desquitó del pobre resultado en el último Mundial –cayó en cuartos de final ante Francia– y levantó la corona continental ante su eterna rival, Portugal, que sigue dominando el palmarés de la competición con 21 títulos.
El inicio del duelo fue frenético: avisó Nil Roca, César no cazó un remate en el área y Hélder Nunes probó los guantes de Carles Grau. Todo en un minuto de juego. España fue valiente, presionó arriba y se adueñó de la posesión ante un equipo luso al que le quemó la bola.
Pau Bargalló falló un mano a mano ante Pedro Henriques tras una asistencia de Martí Casas. No erró el exliceísta Marc Grau, que abrió la lata con un remate en el que mostró todos sus reflejos y su oportunismo. El ‘9’ cazó un rechace de Henriques tras un disparo de Marc Julià y remachó con un bonito gesto técnico de espaldas.
La doble tarjeta azul para otros dos exliceístas, Bargalló y Henrique Magalhaes, se saldó sin consecuencias antes del descanso. Sí que tuvo efecto la tercera azul del partido, para el portugués Telmo Pinto, a los cuatro minutos de la reanudación.
No acertó Bargalló en la pelota parada, pero España aprovechó la superioridad numérica: después de un infructuoso bombardeo, movió la bola con paciencia y Marc Grau remachó en la línea de gol a sólo 10 segundos de acabar el 'power play'.
En la jugada siguiente, Gonçalo Alves cometió la décima falta lusa y, esta vez, Marc Julià fue el encargado de ejecutar la directa. No falló el especialista del Reus, que amagó, se abrió para buscar el hueco y la picó por encima del portero con maestría.
La reacción inmediata de Portugal rebajó la euforia en el Ateneu: Alves recortó distancias con un palazo que se coló en la escuadra de Carles Grau. El 3-1 cambió la energía, Portugal se puso el cuchillo entre los dientes, apretó arriba y protestó a los árbitros hasta que sacó una azul para Sergi Aragonès difícil de entender.
España se libró de la directa al ser una acción sin la bola en juego, o eso señalaron los árbitros pese a las quejas lusas. No se salvó tras la décima, de Julià en una acción ofensiva, pero ahí estaba Carles Grau, también ex del Liceo, un seguro en la pelota parada, que se engrandeció ante Alves para evitar el 3-2.
César tuvo el cuarto, pero falló a bocajarro ante Henriques en una rápida transición y, en la jugada siguiente, de nuevo Alves encontró portería y le puso más picante al partido con 6:48 en el reloj.
Fue un espejismo: Portugal cometió la decimoquinta infracción unos segundos después y el artista Julià repitió ejecución para recuperar los dos goles de ventaja. Fueron suficientes para España, campeona de Europa por decimonovena vez, la tercera consecutivas y las dos últimas con el corazón del Liceo en el equipo, don César Carballeira.
España 4 - 2 Barça |
España: Carles Grau; César Carballeira, Pau Bargalló, Martí Casas, Nil Roca –cinco inicial– Marc Grau, Marc Julià, Xavi Barroso, Sergi Aragonès. |
Portugal: Pedro Henriques; Telmo Pinto, Joao Rodrigues, Gonçalo Alves, Helder Nunes –cinco inicial– Rafa Costa, Nuno Santos, Joao Souto, Henrique Magalhaes. |
Goles: 1-0, min.14: Marc Grau. 2-0, min.30: Marc Grau. 3-0, min.31: Marc Julià, de falta directa.3-1, min.32: Gonçalo Alves. 3-2, min.44: Gonçalo Alves. 4-2, min.44: Marc Julià. |
Árbitros: Marco Rondina y Joseph Silecchia (Italia). Mostraron tarjeta azul a Bargalló, Aragonès, Magalhaes y Costa. |
Incidencias: Final del Campeonato de Europa disputada en el Olímpic de l'Ateneu ante 1.500 espectadores. |