Ximo Navarro, el incombustible lateral derecho del Deportivo, atraviesa un momento estelar en su carrera. A sus 35 años, cumplidos el pasado enero, sigue exhibiendo un despliegue físico impresionante que le permite brillar tanto en defensa, su virtud más destacada, como en ataque, donde ha experimentado una progresión notable. Su rendimiento goleador esta temporada ha alcanzado cotas inéditas en su trayectoria profesional, con cuatro tantos, lo que refuerza su rol clave en el equipo. No es de extrañar que el club esté trabajando activamente para renovar su contrato, que expira en junio de 2025.

Su galopada en el tiempo añadido en el Carlos Tartiere, que valió para anotar el gol de la victoria ante el potente Oviedo (1-2), es una muestra del magnífico momento de forma del futbolista, un líder silencioso que, partido a partido, eleva el techo competitivo de este Dépor.

Impacto en ataque

El primer gol de Ximo en la presente campaña llegó en la segunda jornada en El Alcoraz. Tras recibir un pase sutil de Yeremay, orientó el cuerpo y cruzó un disparo con el interior de su pie derecho. Fue el único de sus goles que no se tradujo en puntos para el Deportivo.

Los tres restantes han sido determinantes en victorias. Su diana más reciente, en el minuto 91 contra el Oviedo (1-2), reafirmó su capacidad para aparecer en momentos clave. Antes, hizo el 0-2 en la goleada contra el Cartagena (1-5), conectando un cabezazo tras un córner ensayado, y también anotó el tanto del triunfo en Ipurua ante el Eibar (0-1), finalizando una jugada que él mismo inició con una internada por la banda derecha.

Su aportación ofensiva no se limita a sus cuatro goles. En El Plantío dio una asistencia: llegó a línea de fondo, levantó la cabeza y cedió el cuero atrás para la aparición de Mario Soriano, autor del gol del triunfo frente al Burgos (0-1).

De hecho, su impacto en tareas ofensivas fue resaltado por Óscar Gilsanz tras la victoria en el Tartiere: “Está teniendo un gran protagonismo en el juego de ataque. Está con confianza y estamos viendo a un Ximo con rendimiento espectacular. Es para felicitarlo”.

Un bastión en defensa

Aunque su faceta ofensiva acapara la mayoría de los focos durante esta temporada, la clave de Ximo sigue siendo su seguridad defensiva. Es el futbolista con más intercepciones en Segunda División (49), una estadística que subraya su capacidad para anticipar y leer el juego rival. Le siguen en este apartado Miguel Atienza (46), mediocentro del Burgos; Jérémy Mellot (44), lateral del Tenerife; y David Affengruber (44), central del Elche.

Exceptuando dos despistes en centros laterales al inicio del curso, que costaron goles ante Eldense y Racing de Santander en Riazor, el jugador balear ha sido un seguro de vida en defensa. Su presencia minimiza los ataques peligrosos por su sector, una solidez que ha convertido al Deportivo en un equipo más fiable.

A nivel disciplinario, también ha demostrado inteligencia. Desde que vio su cuarta amarilla en la jornada 23 ante el Burgos, ha sabido jugar al límite sin ser sancionado por acumulación de amonestaciones.

Versatilidad y recursos

En 2025, Gilsanz ha asentado una estructura en fase ofensiva que permite a Ximo proyectarse en ataque con libertad. La clave radica en el rol de José Ángel, mediocentro que se incrusta entre los centrales para generar una salida de tres, lo que libera a los laterales para tomar altura. En muchas ocasiones, tanto Ximo como Obrador disponen de la banda para ellos solos, ya que los extremos se meten por dentro.

No obstante, la aportación de Ximo va más allá de su despliegue ofensivo. A lo largo de su carrera ha desempeñado diversas funciones, incluyendo la de central, y su versatilidad permite a los entrenadores modificar la estructura sin necesidad de cambios. Puede integrarse en la salida de balón como tercer central, como ya hizo con Imanol Idiakez en buena parte del pasado curso, puede jugar en una línea de cuatro como lateral clásico o puede ejercer de carrilero. Es capaz de dar amplitud por fuera y también de interpretar el juego para aportar por dentro, ya sea con o sin balón. Un lateral total.

Incógnita muscular

Ximo cerró la pasada campaña en un estado de forma excelente, pese a haber sufrido tres lesiones musculares. En la presente temporada, un problema en el aductor izquierdo lo apartó tres jornadas en noviembre, pero supo recuperar su mejor nivel con el paso de los partidos. Su resistencia y capacidad para mantenerse en plenitud son esenciales para el Deportivo, que necesita su continuidad sin contratiempos para aspirar a cotas mayores.

Renovación prioritaria

El club es consciente de la importancia de asegurar la continuidad de Ximo Navarro, cuyo contrato expira en junio de 2025. Las negociaciones están en marcha y todo apunta a un desenlace positivo.

“Estoy muy contento desde que llegué. Se sabe cuál es mi situación, estoy tranquilo, feliz, y eso se ve en el campo”, declaró tras el partido ante el Oviedo. La posibilidad de extender su vínculo más allá de 2026, ya sea de forma explícita o con una opción ligada a objetivos, está sobre la mesa.

Ximo Navarro es mucho más que un lateral derecho. Su rendimiento, regularidad y versatilidad lo han convertido en un pilar del Deportivo. Su renovación es una cuestión estratégica para un equipo que busca consolidar su proyecto y seguir creciendo con la mirada puesta en Primera División a medio plazo.