Riazor celebró con rabia el gol de David Mella, que dio el empate al Deportivo ante el Sporting de Gijón. No era para menos la explosión de júbilo del estadio herculino. Un punto cuando parecía que se escapaban los tres y una nueva diana. Es la quinta que ha podido celebrar la hinchada blanquiazul en casa, de las 19 que lleva, tras 16 jornadas disputadas. No son muchos goles y es que el Dépor tiene un promedio de 0,6 tantos por partido en Riazor. Números escasos para un equipo que ha marcado en total el mismo número de dianas (19) de las que ha encajado. 

Con Imanol Idiakez fueron tres, dos lleva el equipo como local desde que Óscar Gilsanz cogió las riendas del equipo. Además, los goles deportivistas en casa han supuesto victorias en solo dos encuentros, ambas por la mínima: contra el Racing de Ferrol y ante el Eibar, una con cada uno de los dos técnicos.

Pobre bagaje

El balance en casa se resume en esos dos triunfos, tres empates (Málaga, Eldense y Sporting de Gijón) y el mismo número de derrotas (Oviedo, Burgos y Racing de Santander). La jornada inaugural el ‘respetable’ se fue de vacío, al perder el equipo contra el Oviedo (0-1). Riazor tuvo que esperar hasta la tercera jornada para cantar el primer gol. Fue el 1 de septiembre, ante el Racing de Ferrol, y marcó Yeremay. Dos jornadas seguidas la hinchada se marchó sin poder celebrar tantos. En la sexta, los coruñeses perdieron de forma incontestable contra el Burgos (0-2) y en la octava sumaron un punto al firmar un empate frente al Málaga.

En la décima, el 19 de octubre, más de un mes después, la hinchada local volvió a festejar un gol. Fue obra de Bouldini, en las tablas contra el Eldense (1-1). El epílogo de Idiakez como técnico del Deportivo se cerró con una derrota ante el Racing de Santander (1-2). El solitario tanto blanquiazul fue obra de Yeremay, que es el que más dianas lleva en Riazor.

En el estreno en el campo coruñés de Gilsanz como míster deportivista el gol se hizo esperar. Llegó casi al final, rubricado por Mario Soriano, y le dio al Dépor los tres puntos ante el Eibar. El pasado domingo, también con suspense, el conjunto blanquiazul logró salvar un punto gracias a Mella.

Mientras en casa cuesta sudor, lágrimas y mucho corazón marcar, fuera parece que el Dépor está más cómodo, o al menos eso dicen los números. 14 de los 19 goles los ha rubricado como visitante. Destacan sendas ‘manitas’, ante Albacete, entonces con Idiakez, y contra el Cartagena, en el debut de Gilsanz en la banqueta del Dépor. 

Porque, curiosamente, solo el equipo ha sido capaz de ganar goleando. Dos triunfos, empates con Granada y Elche y derrotas contra Huesca, Córdoba, Levante y Almería. En Riazor, sin embargo, al Dépor no se le caen los goles.