Nadie es profeta en su tierra y como otros muchos canteranos le tocó hacer las maletas y demostrar su valía fuera antes de que volviesen a abrirse para él las puertas del Deportivo. Ahora Hugo José Rama Calviño (Santiago de Compostela, 1996) las tiene abiertas de par en par y aprovecha esta segunda etapa en el club blanquiazul, dándole valor a la oportunidad y sirviendo también de cicerone para los más jóvenes, como Yeremay, Barcia o Mella, este último, uno con los que más relación tiene.
Como Mackay tuviste que salir del club para ahora regresar y tener minutos, ¿cómo ha sido ese proceso?
Al final lo que hablamos muchas veces entre nosotros. Toca salir y no bajar los brazos, porque lo que queremos Mackay, yo o incluso Lucas es volver a casa y estamos muy contentos de estar aquí.
Pero al final es como que nadie es profeta en su tierra, tienes que marcharte, demostrar y regresar, ¿no? Es un poco triste que pase eso...
Al final los jugadores tenemos momentos. Yo igual no estaba todo lo bien que tenía que estar y también hay que mirar dentro de cada uno, lo que está haciendo bien o mal. Creo que era el momento de venir y aquí estoy feliz.
Igual (en su etapa anterior) no estaba todo lo bien que tenía que estar
¿Te ves un poco reflejado en esos jugadores nuevos que están saliendo ahora: Yeremay, Barcia, Mella…? Con esas ansias y ganas, es una suerte para ellos que ahora sí se esté apostando por la cantera…
Sí, yo se lo digo a ellos, sobre todo a Mella, que es el que más está conmigo, que aproveche que le dan valor a los jugadores. Es verdad que ahora el Depor está en Primera Federación, pero este equipo sigue siendo el Depor, sea Primera RFEF, Segunda o Primera es el Depor y esperamos ayudarles también a ellos a que su progresión sea más grande en una categoría superior.
Le digo a Mella que aproveche que le dan valor a los jugadores (de cantera)
Dices que es el Depor, aunque está en Primera Federación, pero ha tardado en apostar por la cantera, ¿no? Casos como el de Yeremay, que el año pasado no jugaba nada y ahora contamos los días para que vuelva de su lesión…
Yo veía los partidos el año pasado e incluso cuando debutó y se le ven cosas diferentes al resto. Es un jugador diferente y que necesita mucha confianza, porque es un futbolista que encara, que rompe a los defensas rivales con su calidad y necesita confianza. Creo que ahora la tiene, pienso que puede ser diferente y esperemos que cuando vuelva nos dé mucho.
Viendo el Depor que dejaste y el que te has encontrado, ¿les ves cosas mejores o peores? ¿Ha cambiado mucho?
Aunque nos duela mucho a todos los que queremos al Depor, nos jode estar en la categoría en la que estamos, pero creo que veces es bueno darse cuenta de lo que hay en la casa. Jugadores como Yeremay, Mella, Barcia o Jairo, que tienen menos oportunidades. Es importante darse cuenta que lo que hay en casa vale la pena también. Esperemos que ahora que hay una base en la cantera podamos ayudarlos nosotros a crecer.
Dices de ayudarlos a crecer, ¿es ahora incluso más difícil para un jugador joven por lo que lo rodea, al estar más expuesto por las redes sociales?
Sí, creo que sí. Lucas, Mackay, que son gente más mayor, lo hablan. Ahora un niño con 16 años tiene redes, un niño que debuta con 16-17 años y no está bien “lo van a matar” y es muy complicado para ellos. Entiendo que a mí se me critique, el fútbol es así, tienes que entender las críticas, el que un día salgas al estadio y te piten, es lo que hay. Estás expuesto en el deporte más bonito del mundo, pero tienes que lidiar con ello y para un chaval de 18 es más complicado que para mí, que tengo 26. Hay que saber llevarlo.
Estás expuesto y tienes que lidiar con ello y para un chaval de 18 años es más difícil
En ese aspecto, ¿el club os da algún tipo de soporte? ¿Hay algún tipo de figura a la que acudir, como un psicólogo teniendo en cuenta la cantidad de jugadores jóvenes que se están sumando?
Creo que ellos mismos se tienen que dar cuenta (los jóvenes). No me di cuenta hasta que ya exploté. Yo tenía 16-17 años y crees que ya no eres válido o igual no te gusta tanto como tú creías el fútbol y es complicado ese momento. Si no te apoyas en un psicólogo, yo intenté apoyarme en mi familia, pero es tu familia, va a buscar tu bienestar y te va a decir ‘si lo tienes que dejar, déjalo’, entonces es complicado. Nosotros a los chavales los intentamos ayudar, sobre todo Lucas, o Salva o Balenziaga, que son los que más experiencia tienen y son unos compañeros increíbles. Ellos los ayudan mucho y pienso que ahora mismo no van a tener problema, porque son chavales con personalidad y con ganas de comerse el mundo.
¿Lo complicado ahora es mantenerse y tener los pies en el suelo?
Yo la verdad es que en el momento en el que exploté me rompí la rodilla y esas cosas en el momento lo pasas mal, pero luego vienen bien para darte cuenta de que al final eres una persona como el resto que hay en la calle y te ayuda a verlo de otra manera. El saber que eres un privilegiado y que estás donde quieres estar y que hay que aprovecharlo.
¿Puede que, al margen de que seáis, como tú dices unos privilegiados, haya un poco de ‘mito’ o clichés sobre la vida del futbolista y tenga su otra cara, como las redes sociales y esa sobreexposición?
Es complicado, porque yo el domingo voy a ganar el partido, pero por lo que sea empatas y tienes que irte a tu casa porque al final es tu trabajo y tú no estuviste todo lo que bien que tenías que estar para ganar e igual no es lo que te apetece en el momento, pero es lo que toca. Somos unos privilegiados, mucha gente querría estar jugando al fútbol y está trabajando en cualquier otra cosa, y entiendo que mucha gente, incluso por envidia, hable más de la cuenta, pero la afición tiene que darse cuenta de que mandándole un mensaje a estos chavales o a cualquiera de nosotros ‘matándonos’… Yo lo entiendo porque al final la frustración la arreglas como tú quieras, pero pienso que no ayuda, aunque nosotros lo entendemos, y es así.
Además ahora estamos en un momento más complicado del equipo, con siete puntos y duodécimo ¿detectáis impaciencia en el entorno?
Sí, nosotros entendemos a la afición, que estén nerviosos. Lo dije más veces, somos el Depor y aquí hay que ganar cada fin de semana, sino ganas es un fracaso y es así. Lo sabemos y que perder el otro día fue un fracaso, porque encima ves que eres mejor en el campo, no metes las que tienes y al final te quedas con cara de tonto, porque te meten en el descuento dos goles. Es complicado, pero nosotros tenemos confianza, el equipo que tenemos, no conozco a todos los de la categoría, pero no lo cambio, no cambio a mis compañeros por ninguno de esta categoría y sabemos que las cosas van a ir a mejor, cien por cien.
Entendemos que la afición esté nerviosa, somos el Depor y hay que ganar siempre
¿El del Fuenlabrada fue el partido que más dolió, también por cómo se produjo?
Fue el que más dolió porque perdemos y porque es un partido que hasta el minuto 80 o así tienes dominado. Luego es verdad que empezamos a hacer cosas que no hacemos, que es pegar pelotazos y no defender altos.
Ganar en Riazor“Queremos darles lo que se merecen” |
Falta ganar en Riazor y supongo que estaréis con muchísimas ganas… Sabemos que en casa con la gente que hay encima tenemos que saber que esa presión está ahí, pero tenemos muchas ganas de que llegue el partido del domingo, sobre todo por el encuentro que es, y de ganar por fin y darles lo que merecen. Mucha gente se está dejando la vida por sacarse un abono, por ir todos los domingos, sábados, el día que toque… Para ellos tiene que ser complicado el ver que su equipo no gana, pero que sepan que nosotros lo vamos a dar todo.
Para ti, como excanterano del Celta, o por ser gallego ¿es especial o al final es un partido más?
Sabes que hay un poco de ‘pullitas’ con que juguemos con el filial del Celta, o que pasaría también si fuese a la inversa… Sí, sabemos que es así. Pero es lo que te decía al principio, al final yo estoy donde quiero estar, Lucas está donde quiere estar, los que vamos a competir con ellos y es lo que nos toca a día de hoy. |