Las dos últimas victorias del Deportivo tienen un denominador común: los goles de Davo. El atacante asturiano consiguió sus dos únicos tantos de la temporada en la jornada 12 frente a la SD Logroñés y el pasado domingo contra el Barça Atlètic, las últimas ocasiones en las que el equipo blanquiazul cosechó los tres puntos de una tacada.
Davo, que recaló en verano en A Coruña procedente del Ibiza, contó desde el comienzo de temporada con la confianza del técnico Imanol Idiakez, aunque su bajo rendimiento despertó las críticas de la afición y eventualmente lo apartó del once titular durante cinco jornadas (de la 7 a la 11).
Sin embargo, el entrenador vasco recuperó al asturiano para formar parte de la alineación inicial de la jornada 12 frente a la SD Logroñés y Davo anotó el 2-0 definitivo a pase de Lucas Pérez.
A partir de ahí, Davo se mantuvo en el once contra Tarazona (1-1) y Osasuna Promesas (1-1), pese a que el Deportivo no consiguió pasar del empate en ninguno de esos compromisos, y repitió de nuevo como titular frente al Barça Atlètic, donde fue determinante anotando el gol del triunfo (1-2) tras una actuación con luces y sombras.
Al rescate de Idiakez
Davo cerró un pequeño círculo con su gol al filial azulgrana. Su definición en el mano a mano ante el portero Marc Vidal salvó de una más que posible destitución al técnico Imanol Idiakez, su máximo defensor en el primer tramo de curso.
Después de ser criticado por buena parte de la afición blanquiazul, el entrenador donostiarra apostó de forma continuada por el asturiano y este le devolvió el gesto con un gol que puede ser decisivo en la continuidad de Idiakez en el banquillo del equipo coruñés.
“Al míster le estoy muy agradecido, trabaja muy bien y mucho”, respondió Davo a los medios de comunicación tras ser preguntado al término del partido ante el Barça Atlètic por la confianza de Idiakez.
Reforzado tras ver puerta en los dos últimos triunfos del Depor, Davo se presenta como candidato claro a repetir titularidad en el próximo partido de liga, que será el domingo en Riazor frente al Sestao.
