“Estamos suspendiendo en el balón parado”. Fue el diagnóstico de Pablo Vázquez en una entrevista concedida a este diario el pasado 3 de octubre, cuando el Deportivo ya había recibido seis goles de esta forma, tres de ellos de penalti. Un mes y medio más tarde, a pesar de experimentar cierta mejoría, el equipo coruñés sigue sangrando por la misma herida. El Dépor recibió contra el Almería un nuevo gol a balón parado, el quinto de la temporada desde el córner, y es el equipo que más tantos encaja en este tipo de acciones (sin contar los penaltis) de toda la Segunda División.
Dejando a un lado las tres dianas recibidas desde los once metros ante Huesca (Óscar Sielva), Burgos (Curro Sánchez) y Córdoba (Ander Yoldi), el Dépor ha recibido seis goles a balón parado: cinco de córner y uno de falta lateral. Ningún equipo de la categoría de plata sufre más en este sentido. El Tenerife es el siguiente en la lista, con cinco tantos recibidos en jugadas de estrategia sin contabilizar los penaltis. Albacete, Burgos, Castellón, Granada y Oviedo han encajado cuatro hasta el momento.
El Dépor, que a estas alturas lleva 18 goles en contra, recibe uno de cada dos a balón parado y uno de cada tres si no se tienen en cuenta los tantos desde los once metros.
El goteo se había reducido desde el comienzo de octubre. El propio Pablo Vázquez expresó en una rueda de prensa el 22 del pasado mes, antes de la visita al Levante, que el Dépor había mejorado en la defensa de las acciones de estrategia. “Cuando te focalizas en algo y te pones a ello de verdad, parece que mejora. Sabíamos que era un problema que teníamos con el balón parado en contra. La gente es consciente de que no podemos regalar tanto en ese tipo de acciones”, aseguró el central. Y justo unos días después se reabrió la herida con el gol de Iván Romero en el Ciutat de València a la salida de otro córner.
Cuatro jornadas después de la derrota en el feudo del Levante, el Dépor, ya sin Imanol Idiakez en el banquillo, volvió a sufrir un tanto desde la esquina, en este caso obra de Edgar para el Almería en el estadio de los Juegos Mediterráneos. Óscar Gilsanz, que experimentó su primer gol en contra en esta faceta desde que es entrenador del primer equipo, defendió a sus jugadores en rueda de prensa alegando que el Almería “en los córners solo remató uno, que fue el del gol”, aunque pasó por alto el testarazo de Leo Baptistao en el minuto 75, que pasó cerca del poste de la portería de Helton Leite. No obstante, el cuadro rojiblanco no creó peligro en los cinco córners restantes.
Pero no todo es negativo. El Dépor ha reducido el desequilibrio entre el daño recibido y el causado a los rivales en las acciones a balón parado. Desde la llegada de Óscar Gilsanz al banquillo, el equipo blanquiazul encadena tres jornadas marcando de córner, algo insólito para el Deportivo.
La racha comenzó con el cabezazo de Ximo Navarro ante el Cartagena tras una acción trazada con precisión entre Lucas y Escudero. Una semana después, Mario Soriano marcó un golazo en el tiempo añadido contra el Eibar tras un saque de esquina botado en corto. Y el pasado domingo Pablo Vázquez remató en plancha un córner lanzado por Hugo Rama y peinado sin querer por Edgar.
Balón en el vértice del área, rival no presionado, centro cerrado, despiste del lateral del Deportivo y gol de cabeza. Podría ser el resumen en modo telegrama del tanto que provocó la derrota blanquiazul ante el Almería (2-1), pero también es la síntesis de otras dos dianas recibidas por el Dépor en lo que va de campeonato en Segunda División.
El conjunto de Óscar Gilsanz había protagonizado una digna primera mitad en el estadio de los Juegos Mediterráneos, pero se fue al descanso por debajo en el marcador por culpa del tanto de Leo Baptistao en el tiempo añadido del primer acto. Centelles tuvo tiempo de sobra para poner el centro y el delantero brasileño apareció a la espalda de Sergio Escudero para castigar el despiste del lateral blanquiazul. “Es una jugada también de acierto de ellos. Yo voy con el marcaje del de delante y me entran en el segundo palo”, explicó el vallisoletano tras el encuentro.
Es la tercera vez que el Dépor sufre un gol similar en el último mes. Antes, el Eldense anotó en Riazor de esta forma en la décima jornada. Obrador y Mfulu dejaron pensar a Álex Bernal, el centrocampista envió el cuero al corazón del área y su compañero Joel Jorquera le ganó la espalda a Ximo Navarro para rematar ante un Helton que se quedó a media salida. Dos jornadas después, también en el feudo blanquiazul, Ximo volvió a ser protagonista por un despiste en la diana de Pablo Rodríguez. El mediapunta del Racing de Santander le pasó por delante y cabeceó a la red el centro de Andrés Martín.
Los centros laterales fueron un problema recurrente para el Dépor en la temporada 2022-23, la penúltima en Primera Federación, y la dirección deportiva decidió hacer hincapié en ese aspecto a la hora de realizar fichajes en el verano de 2023. Llegaron Pablo Vázquez, Balenziaga y el propio Ximo, que junto a Pablo Martínez y con la ayuda de José Ángel elevaron el rendimiento del equipo coruñés en esa faceta del juego. Sin embargo, el Dépor ha vuelto a sufrir en el último mes con los centros laterales sobre todo por despistes de los laterales y una falta de presión al poseedor del balón.
El gol de Leo Baptistao es el séptimo que recibe el Dépor de cabeza en lo que va de temporada. Los testarazos de Edgar y del atacante carioca, que sirvieron al Almería para llevarse los tres puntos, aumentaron esta cuenta que comenzó en la primera jornada con el tanto de Alberto del Moral (Oviedo).
El Deportivo encajó de nuevo un gol de cabeza en la segunda jornada de Liga, obra de Jeremy Blasco para el Huesca, y antes del enfrentamiento en el estadio del Almería también sufrió los testarazos de Jorquera (Eldense), Iván Romero (Levante) y Pablo Rodríguez (Racing de Santander).