El carrilero diestro blanquiazul Antoñito, que completó el partido ante el Tudelano, tras superar sus molestias musculares, reconoció que el encuentro fue un poco loco, aunque al final los tres puntos cayeron del lado del Deportivo.

"Fue un partido de muchos vaivenes, transiciones, partidos para la afición, no para el corazón, pero sí para hacer afición. Ahora que vienen partidos importantes y nos va a servir de entrenamiento para lo que viene", comentó durante su comparecencia de prensa telemática.

Quiso sacar la lectura positiva. "Al final encajas tres goles con un rival con menor nivel que tú, pero remontamos tres veces y hay que sacar lo positivo. Conseguimos los tres puntos en un partido que se puso feo", subrayó el zaguero.

Con respecto al Valladolid Promesas, rival de este sábado a las 18.30 horas, advirtió que los filiales son conjuntos impredecibles. "Son equipos diferentes, pueden tener un día perfecto y que te pinten la cara o que te salgan sin ganas de jugar, son cosas de su gente joven", indicó.