La pandemia de coronavirus sigue entre nosotros, los casos comienzan a aparecer en esta recta final en el mundo del fútbol y el Deportivo no ha sido una excepción.

La rápida detección fue fundamental para evitar males mayores. Todo se remonta a este martes por la tarde. La plantilla había entrenado a las 10.30 horas en la jornada matinal y por la tarde uno de los integrantes del plantel informó a los médicos del club de que no se encontraba bien y que tenía síntomas.

Aislamiento

Rápidamente esa persona fue sometida a un test de antígenos, que dio positivo, por lo que posteriormente se procedió a aislarlo en su domicilio. El club suspendió el entrenamiento matinal de ayer y lo comunicó por la noche a través de su web y sus redes sociales.

Ayer por la mañana toda la plantilla, cuerpo técnico y personal del club se sometió a test en un centro médico de la ciudad. Los resultados de los mismos se conocieron a primera hora de la tarde y todos arrojaron resultado negativo, por lo que se programó un entrenamiento vespertino, que discurrió dentro de la normalidad.

Protocolo actual

La existencia de las vacunas ha supuesto un cambio en lo que atañe al actual protocolo y en lo que se refiere a los considerados como ‘contactos estrechos’, que en el pasado tenían que guardar cuarentena en el caso de que hubiesen estado en contacto con un positivo. Ahora mismo, si una persona ha sido ‘contacto estrecho’ de un caso, por ejemplo en el caso de un equipo de fútbol, si la persona tiene una PCR negativa y cuenta con la pauta completa no tiene que aislarse. Eso explica que, por el momento, equipos con positivos como el Valencia no haya tenido que cancelar sus partidos y hayan podido competir. El Deportivo, que solo cuenta con un caso, podrá asimismo jugar esta noche ante Osasuna el duelo copero y presumiblemente también el partido liguero ante la Cultural Leonesa de este domingo a domicilio, con el que cerrará el año 2021.

Un brote en 2020

El Deportivo sufrió de forma indirecta en sus carnes lo que era un brote de coronavirus en el verano de 2020, con el ‘caso Fuenlabrada’ y el confinamiento de su expedición en un conocido hotel de la ciudad.

El cuadro blanquiazul, que acabó bajando esa campaña y no pudo jugar el partido ante los madrileños de la última jornada, tuvo que esperar hasta agosto para disputar un encuentro totalmente desvirtuado, ya que no se disputó en jornada unificada, y con los coruñeses ya descendidos por los resultados dados.