El brasileño Júlio Baptista, entrenador del Real Valladolid Promesas, fue uno de los fichajes que hicieron grande a Monchi como director deportivo del Sevilla.

En julio de 2003, el club nervionense compró al ‘canarinho’ al Sao Paulo. Se trataba de un jugador joven, de 21 años, pero que ya era internacional absoluto con Brasil.

La ‘Bestia’, como se le conoció durante su etapa como jugador, se había desempeñado como centrocampista defensivo en su país. Sin embargo, Joaquín Caparrós, técnico del Sevilla, adelantó su posición hasta emplearle como mediocampista ofensivo e incluso delantero. Resultado, Baptista marcó 20 goles en su primera temporada en la liga española y 18 en la segunda, lo que provocó que el Real Madrid pagara 20 millones de euros por él en el verano de 2005.

El jugador nacido en Sao Paulo, que posteriormente militó en el Arsenal (cedido por el equipo blanco) y la Roma, también pasó por las filas del Málaga, tercer y último equipo español en el que jugó.

En total disputó 161 partidos en el fútbol español (151 de Liga, 9 de Copa del Rey y uno de la Supercopa) y marcó 64 goles (63 en el campeonato liguero y uno en el torneo del KO), además de repartir ocho asistencias en la competición de la regularidad.

Su último tanto en España se lo marcó al Deportivo en el que fue su penúltimo partido en la competición nacional, en un encuentro que dejó al cuadro blanquiazul con un pie en Segunda División.

El 26 de mayo de 2013, el equipo coruñés viajó a Málaga con la obligación de sumar un triunfo para sellar la permanencia en Primera a falta de una jornada. Había sido una campaña complicada que inició José Luis Oltra en el banquillo, al que sucedió el portugués Domingos Paciencia, tras 18 partidos, y que terminó con Fernando Vázquez, después de que el luso pegara la espantada tras solo seis jornadas al frente de la plantilla.

El Depor cayó 3-1 en Málaga y Baptista, que fue titular y jugó los 90 minutos, marcó el segundo de los tres tantos malacitanos. Un resultado que dejaba a los herculinos con un punto por encima del descenso, que ocupaban Celta y Zaragoza con 34 puntos, y el Mallorca con 33.

Una semana después, el cuadro blanquiazul cerró la Liga perdiendo en Riazor con la Real Sociedad (0-1), resultado que le condenó a Segunda, ya que el Celta venció en Balaídos a un Espanyol que no se jugaba nada (1-0) y terminó escapando de la quema.

La ‘Bestia’ se enfrentó al Deportivo en un total de siete ocasiones (cuatro como sevillista, dos en las filas del Real Madrid y el duelo con el Málaga que dejó prácticamente hundido al Depor en la campaña 2012-13).

El brasileño, que fue titular en seis de sus siete enfrentamientos con la escuadra blanquiazul y acumuló un total de 532 minutos, sumó tres victorias y un empate contra los herculinos, mientras que sufrió tres derrotas.

Además del tanto que marcó en el 3-1 con el Málaga en La Rosaleda, hizo el 2-2 en el minuto 90 en el empate que arrancó el Sevilla en Riazor el 12 de diciembre de 2004, y anotó el cuarto en el 4-0 del Real Madrid al Depor en el Santiago Bernabéu el 26 de marzo de 2006.

Baptista mordió el polvo con el conjunto coruñés en sus dos primeros enfrentamientos (el 1-2 en el Sánchez Pizjuán y el 1-0 en Riazor frente al Sevilla en el curso 2003-04) y en el 1-0 de los herculinos al Real Madrid en A Coruña el 15 de marzo de 2008 con un gol en propia puerta de Pepe.