Tanto es así que tiene el título de Maestro por la Federación Italiana.

“Soy el primer extranjero que obtiene este reconocimiento”, asegura satisfecho.

Su pasión por la esgrima histórica le ha llevado a numerosos países (quizás más de los que hubiera visitado en el caso de decantarse por la competición). “He dado clase en toda Europa: Italia, Rusia, Suecia, Portugal...”. También ha estado en Estados Unidos y lo último ha sido una gira por Australia. En breve le toca volver a Estados Unidos, y después a Rusia.

Pero no solo difunde la esgrima histórica en sí. En concreto, es experto en un arte español del siglo XVI. “Me dedico a un estilo denominado ´la verdadera destreza’. A partir del siglo XVIII y XIX perdió fuerza sobre todo por la moda del estilo francés. Pero ahora lo estamos recuperando”, comenta el Maestro. De esta manera, hay academias en Atenas, Dublín y Brescia, además de en Idaho (Estados Unidos). En España están concentradas en el noroeste: Asturias, Ourense y, por supuesto, A Coruña.

Juegos Europeos
Y el año que viene se presenta un reto muy interesante: Y es que Ton Puey señala que la esgrima histórica va a ser deporte de contacto de exhibición en los Juegos Europeos  de Minsk (Bielorrusia). “Soy uno de los dos delegados de la península ibérica para esa cita”, comenta, así que va a tener trabajo extra en los próximos meses.

Puey reconoce que la esgrima histórica tiende cada vez más a la competición. “No es algo malo. Las artes marciales nacieron pensadas para la guerra y ahora coexisten la vertiente tradicional y la deportiva.

Creo que eso es lo que pasará con la esgrima histórica”. De todas formas, indica que, para él, lo ideal es “darle un enfoque de arte marcial, que no siempre coincide con el deportivo”.

Ton Puey asegura que jamás se imaginó que iba a llegar tan lejos cuando empezó a dar sus primeros pasos en el mundo de la esgrima histórica, hace ya quince años. “Descubrí artesanos que todavía hacían este tipo de armas funcionales. Y que había movimiento en el mundo, sobre todo en Italia”.

Así, ahora tiene su propio grupo de esgrima histórica, la Academia da Espada, y viaja por todo el mundo difundiendo ‘la verdadera destreza´. Y aún le quedan muchos duelos por afrontar (y por disfrutar) al Maestro Ton Puey.