Felipe VI ha recibido este viernes a los medallistas del equipo nacional de piragüismo que compitieron el pasado año en los Mundiales, en el que España fue por primera vez el país con más metales, y en los Europeos, donde acabó en tercera posición.
La audiencia ha tenido lugar en el Salón Magnolias del Palacio de la Zarzuela, donde la delegación ha estado encabezada por el presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), José Manuel Franco, y el de la Real Federación de Piragüismo (RFP), Javier Hernanz.
En el campeonato mundial de Halifax (Canadá) celebrado en agosto, España obtuvo un histórico resultado al situarse en lo más alto del medallero, con ocho metales, cuatro oros, dos platas y dos bronce.
En los Europeos, disputados dos semanas después en Múnich (Alemania), los canoístas españoles quedaron terceros en el palmarés por detrás de Alemania y Hungría, con cinco oros, siete platas y tres bronces.
La expedición que ha acudido a la Zarzuela ha estado compuesta por una veintena de piragüistas, entre ellos Marcus Cooper, Adrián Sieiro, Carlos Arévalo o Antía Jacome, así como Inés Felipe, de paracanoa.
También se ha sumado a la cita con el rey la campeona olímpica Maialen Chourraut, aunque no obtuvo ninguna medalla en el Europeo, ni en el Mundial.
Entre los medallistas del pasado año no han podido asistir a la cita Saúl Craviotto y Teresa Portela.
Hernanz ha regalado a Felipe VI dos medallas de campeones del mundo, una de ellas grabada con el nombre del monarca, y una foto de pequeño del entonces príncipe practicando piragüismo, han informado a EFE fuentes de la RFP.