El San Tirso está inmerso en su gran semana, esa en la que recibirá en Riazor al Espanyol (jueves, 19.00 horas) en partido de primera ronda de Copa del Rey. Para la mayoría de los equipos que participan, incluido su rival, este es el inicio del trayecto. Para los de Abegondo, la decimocuarta parada de un viaje cargado de emoción que nunca olvidarán.
Once eliminatorias y cuatro tandas de penaltis.
Quizá el mejor resumen es que para llegar hasta aquí, el San Tirso ha necesitado superar once eliminatorias –seis de Copa de A Coruña, dos en Copa Diputación, otras dos de Supercopa Galicia (a ida y vuelta) y la ronda preliminar de la Copa del Rey–. Además, avanzó cuatro veces en la tanda de penaltis. Como si de un círculo se tratase, lo hizo el primer día, ante el Torre, y también el último, frente al Selaya cántabro. Entre medias, esa misma forma de ganar en la final de la Copa de A Coruña contra el Victoria y en una apretada semifinal de Copa Diputación frente al Sigüeiro.
La tranquilidad no fue la nota predominante.
El número de tandas de penaltis muestra de sobra la dificultad del camino, pero por si eso fuera poco, el equipo dirigido por Fabio Rodríguez remontó un partido en Carral que iba perdiendo en el minuto 85, ganó en Visantoña con un gol postrero, se vio por debajo en el marcador contra el Cultural Areas y el Selaya, etc.
César, bandera de los que ya no están en plantilla.
La aventura comenzó en diciembre del año pasado, por lo que el camino ha incluido dos temporadas. Ya no están en plantilla con respecto al curso anterior Unai García, Dani Bacariza, Litos y, sobre todo, los veteranos Santi Brandariz y César Freire, que colgaron las botas tras levantar dos títulos con más de 43 años. César lideró el centro de la zaga jugándolo todo hasta que se retiró y Santi ganó por fin una Copa de A Coruña que se le resistía.
Vigo, Christian y Quintás entran con el pie derecho.
Los cambios en plantilla fueron mínimos, pero hay caras nuevas que comenzaron a aportar desde verano en la Supercopa. Todavía busca su hueco en el equipo Pedro Carpente, que llegó a última hora como oportunidad de mercado, pero el central Pablo Vigo, el centrocampista Christian Rey y el delantero Cristian Quintás ya han dejado su sello en este primer tramo de temporada. Los dos primeros con un gran número de minutos y solidez; el punta, con un gol fundamental ante el Selaya, al filo del descanso, que sirvió para dar calma al equipo, que había iniciado nervioso.
Tres grandes especialistas desde los once metros.
El San Tirso lanzó 20 veces desde el punto fatídico en las cuatro tandas que afrontó y marcó 19 goles, lo que supone una efectividad del 95%. No hubo ningún jugador que asumiera la responsabilidad en los cuatro partidos, pero sí varios (Meijide, Sito y Segade) que lo hicieron en tres partidos. Uno de ellos, Meijide, fue el encargado de cerrar la final de Copa Coruña contra el Victoria.
Adri, fundamental a la hora de detenerlos.
Y tan importantes son los lanzadores como el guardameta. Con Lameiro en portería, el Torre falló dos y el San Tirso uno, pero a partir de ahí los de Abegondo no perdonaron ni uno y Adri aportó siempre una parada, ante Victoria, Sigüeiro y Selaya, que fue devisiva para lograr el triunfo sin necesidad de ir al fallo.
u Denis, de dulce durante todo el camino.
Denis, de dulce durante todo el camino.
El delantero de Caión no participó en las primeras rondas de Copa de A Coruña, donde tenían su opción los jugadores menos habituales; y también se perdió la Copa Diputación por motivos personales, pero firmó un excelente ratio de goles/minuto durante los nueve encuentros que disputó. Ha sido el máximo goleador del camino con ocho tantos. Su mejor partido fue la vuelta ante el Cultural Areas.
Los peculiares casos de Brichu Ares y Litos.
Historias como la del San Tirso siempre dejan detalles curiosos. Uno fue el de Brichu, que apenas jugó doce minutos en todo el camino, suficientes para desatacar con un gol la eliminatoria contra el Visantoña; y para anotar el penalti decisivo ante el Selaya tras entrar expresamente para eso debido a su buen pie. Por su parte, Litos contó con ficha durante inicio de año para jugar algún partido de Liga mientras no regresaba a Estados Unidos y, al encontrarse el 23 de junio en España pudo ayudar al equipo en los últimos minutos de la final de la Copa Diputación
Meijide, el jugador más utilizado por Fabio Rodríguez.
Nadie hizo pleno en cuanto a disputar los trece partidos, pero sí hay varios hombres que participaron en doce. De ellos, el que más estuvo sobre el campo fue Iago Meijide. El central David Lago es el otro que rebasó la barrera de los 1.000 minutos.