Irene García Basanta, Pili Neira, Lis Franco, Miriam Ríos, Elena Roca, Sofía Toro, Irene Martínez... A Coruña está sobrada de referentes en el deporte femenino. Los números no dicen lo mismo. La igualdad no existe. Tampoco aquí. El Concello quiere ajustar la brecha entre hombres y mujeres con un ambicioso Plan de Igualdad que presentó ayer en el Ágora, un programa pionero en la ciudad de las pioneras.
“No hay ningún organismo, ni público ni privado, que llevase a cabo una investigación tan minuciosa sobre el estado de la mujer en el ámbito deportivo”, proclamó la alcaldesa, Inés Rey, que estuvo acompañada por Montserrat Vale, María Vázquez y Mar Barcón, coordinadoras de un plan que se gestó en la Comisión de Mujer y Deporte del Consejo Municipal de Deportes.
“Las deportistas, entrenadoras o directivas de clubes y federaciones son mujeres conscientes de una realidad que solo se puede cambiar desde la acción política y el compromiso social”, recordó Vale, que definió el diagnóstico como “una especie de foto que nos explica cuáles son las principales dificultades con las que se pueden encontrar las mujeres en el ámbito del deporte”.
“Los atributos que se asocian al éxito en el deporte son socialmente interpretados en clave masculina: más fuerte, más alto, más rápido... El cuerpo de un deportista era un cuerpo musculuoso y un cuerpo musculoso era siempre un cuerpo masculino”, lamentó Vázquez, que recalcó la necesidad de “detectar el aspecto de género y realizar un análisis cuantitativo así como una evalución cualitativa” de la mujer en el deporte.
Más de 200 clubes y entidades deportivas participaron en la elaboración del programa y más de 900 personas, entre ellas más de 500 deportistas, respondieron a los 12 formularios diseñados para la ocasión. Además se organizaron siete mesas de participación en las que se abordaron las necesidades y los problemas de las mujeres en el deporte.
Mar Barcón expuso el exhaustivo estudio y análisis de la situación del deporte femenino, en Galicia (con cifras del CSD) y en A Coruña (según los datos recavados por el propio diagnóstico), después de recordar con emoción a Pablo Aguirregabiria, histórico entrenador del OAR que falleció el pasado martes.
Durante algo más de media hora, presentó un goteo de gráficos y porcentajes con el foco en el deporte federado, las escuelas municipales deportivas, los grados y ciclos de actividad deportiva, la Carrera de la Mujer, el circuito Coruña Corre y las otras pruebas de ‘running’ en nuestra ciudad, el personal de la Concejalía de Deportes, el personal de equipamientos deportivos, prensa y arbitraje.
El proyector del le jugó una mala pasada, los números no eran fáciles de ver desde los asientos del auditorio, pero el diagnóstico es una prueba irrefutable de la triste realidad que viven las mujeres en el deporte: siguen siendo minoría, aunque hay casos excepcionales y el número crece cada año, poco a poco.
El Plan de Igualdad es necesario para situar al deporte femenino en el sitio que se merece, para romper los techos de cristal y recuperar el legado de las pioneras que llevaron el nombre de A Coruña por el mundo adelante. Más altas, más rápidas, más fuertes.