El Deportivo Liceo ejerció de campeón en una de las pistas más complicadas de España, Les Comes, que asistió a un recital (1-7) de los hombres de Juan Copa, que en los 16 primeros minutos ya habían encarrilado el pase a las semifinales, donde se medirán al Calafell, que también eliminó por la vía rápida al Lleida. 

Imposible contar qué paso en los 5 primeros minutos, ya que la retransmisión de la OK Liga TV no se pudo disfrutar hasta el 6. Justo a tiempo. Un 2 contra 2 del Igualada no aprovechado dejó al equipo local descolocado y abierto, la bola llegó a la trasera de la portería, desde donde Ricart sirvió a Carballeira y este batió a un vendido Torrents.

Y otro pequeño ‘blackout’ de la señal. Unos segundos después de recuperar la imagen Manrubia sorprendió al meta arlequinado con un misil desde prácticamente la mitad de la pista.

Control absoluto

Este segundo tanto asentó todavía más a un Liceo controlador desde que abrió el marcador. Dinámico a la hora de mover la bola, ocupando muy bien los espacios, no concendiendo contras y presionando al Igualada. En su jugada sin aparente peligro, Alex Rodríguez se sacó un pase fantástico que Di Benedetto remachó delante de Torrents. Habían transcurrido sólo 14 minutos.

Dos después, el conjunto catalán gozó de su mejor ocasión, un tiro de Carol que repelió el tubo derecho de Serra. Y en la siguiente jugada llegó el cuarto. La presión en la salida de bola del Igualada dio sus frutos. Manrubia robó en campo rival, se apoyó en Alex Rodríguez, que con dos amagos venció a la defensa y al meta y sirvió a su compañero cedido por el Benfica para que marcara a puerta vacía.

Y segundos después llegó el segundo palo local, en esta ocasión de Riba. La fortuna va por barrios. Cinco bolas en los tubos estampó el Liceo en el primer partido de la serie. 

Un remate ligeramente alto de Canal en boca de gol, una parada de Serra a Zilken y un tuya-mía entre Manrubia y Ricart, que el primero no acertó a rematar bien, completaron la nómina de jugadas peligrosas de la primera mitad.

La de la segunda la inauguraró un tubazo de Carballeira y un paradón de Torrents a Dava Torres. De portero inspirado a portero errático. Serra no acertó a despejar bien con el stick en el área y le puso en bandeja a Yeste el 1-4.

Copa paró el partido, seguramente con el recuerdo del 4-1 que los suyos se dejaron igualar en Riazor. Devolvió a pista Carballeira. Y el Liceo retomó el control. El travesaño evitó el ‘hat-trick’ de Manrubia, pero no pudo hacer lo mismo Torrents. Un tiro lejano de Di Benedetto, repelido por el fondo de la pista, lo recogió Pol, que pasaba por allí, y alojó la bola en la escuadra derecha.

En los 11 minutos que restaban, tiempo para el lucimiento de ambos guardametas. El local ante Alex Rodríguez –dos veces– y el visitante frente a Vives y a Marimón.

Al MVP del primer partido (4 goles y 1 asistencia) se le resistía la suerte suprema. Hasta que, a falta de 1:38, entró en juego Tombita. A los 31 segundos de hacerlo asistió desde detrás de la portería a Alex Rodríguez, que por fin pudo con Torrents. Veinticinco más tarde, el argentino se fue por la derecha y la puso en el mismo sitio que Manrubia en el 1-5. No se puede hacer más en menos tiempo.