Manuel Pellegrini, entrenador del Betis, se quejó este sábado del arbitraje que sufrió en el Coliseum y declaró que existieron "siete u ocho manotazos" que el colegiado del partido, César Soto Grado, podría haber sancionado con cartulinas amarillas o rojas.
"El Getafe es un equipo que tiene un estilo y en este partido hubo siete u ocho manotazos en la cara que cortaron contras. Hay amarillas o rojas que no se revisan y cada uno tiene su estilo. Es el árbitro el que tiene que marcar el límite", señaló.
Además, Pellegrini se mostró satisfecho por el punto que consiguió en el Coliseum tras empatar 1-1: "Más que el rendimiento individual (en referencia a Isco) me gusta el colectivo. Hicimos un buen partido, fuimos a por los tres puntos desde el principio. Dimos un buen nivel ofensivo en el que el inicio del juego y la cantidad de ocasiones reflejó un juego que me gustó y que no pudimos confirmar", señaló.
"Salimos a por los tres puntos desde el principio. La idea era ganar. Tuvimos aproximaciones más peligrosas. En el último minuto tuvimos la del triunfo y en término generales acabé satisfecho con el rendimiento del equipo. Y si no se puede ganar, que no se pierda con un error en una jugada. En eso estoy satisfecho con el punto porque somos un equipo competitivo", añadió.
También explicó las razones por las que cambió a Germán Pezzella por el debutante Visa: "Estaba cansado y tenía una amarilla. Podía llegar tarde en una jugada y sacarle la roja. Y llegó el jueves algo cansado y podía tener una lesión muscular con la que podía perderse algún partido", indicó.
Por último, analzó la actuación de Borja Iglesias: "Las actuaciones individuales las analizó con los jugadores. Creo que tuvimos bastantes ocasiones claras, Borja participó en el primer gol y luego tuvo el segundo. Va participando y mejorando. No solo tiene que hacer goles, tiene que tener un volumen alto de jugadas arriba", concluyó.