Unai Emery, prestigioso entrenador español del Aston Villa, estuvo presente el pasado sábado en el palco de Riazor para asistir al último partido de la liga regular de Primera Federación entre el Deportivo y el Real Unión de Irún, club del que es propietario junto a su hermano Igor. El técnico de Hondarribia, que logró con el equipo inglés la clasificación para la próxima edición de la Liga de Campeones, presenció el partido en Riazor pero se retiró del palco con 3-0 en el marcador y no llegó a ver el gol postrero de Antón Escobar (3-1).
La visita a Riazor también supuso para Emery el reencuentro con Imanol Idiakez, que fue su segundo entrenador desde 2020 a 2022 en un Villarreal que conquistó su primer título de la historia: la Europa League 2020/21.
El ex del Arsenal, PSG, Sevilla y Valencia, entre otros, había visitado por última vez Riazor el pasado 30 de noviembre de 2021, un día marcado en la historia de uno de los equipos emblemáticos del fútbol modesto coruñés: el Victoria. Emery, que en aquel momento era el entrenador del Villarreal, honró la Copa del Rey alineando un equipo competitivo ante el conjunto blanquinegro y logró el pase a la segunda ronda con claridad tras vencer 0-8.
Vínculo con A Coruña
Sin embargo, la conexión entre la familia Emery y el Deportivo va mucho más allá. Su padre Juan fue portero del equipo coruñés desde 1959 a 1962, años en los que compartió vestuario con Amancio Amaro. “Mi padre siempre me ha hablado del Deportivo. Le tengo un cariño especial al Depor por mi padre y por el Superdepor”, dijo Unai Emery en una entrevista concedida a este diario en el 2008.
Además, Antonio Emery, abuelo del entrenador del Aston Villa, jugó en varias ocasiones en A Coruña guardando la portería del Real Unión de Irún durante la década de los 20. Su primer partido en el Parque de Riazor, que estaba situado en la zona de Las Esclavas, se remonta al 25 de abril de 1926 en la vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey. Después de dejar la portería a cero en la ida (3-0) en Amute (Hondarribia), Antonio Emery volvió a jugar en el Parque de Riazor, primer campo que fue propiedad del Deportivo.
Antonio Emery recibió tres goles pero fue el sustento del Real Unión en la reacción del Deportivo. La crónica de aquel partido de El Ideal Gallego cuenta que el conjunto vasco, que la siguiente temporada conquistó su tercera y última Copa del Rey, se puso 0-3 con goles de René, con la colaboración del local Ramiro, y Alza, este por partida doble. Guillermo marcó el 1-3 para el Depor y acto seguido René hizo el 2-4. No obstante, el equipo coruñés siguió asediando la portería de Emery hasta subir el 3-4 definitivo al marcador con un doblete de Ramón.
A pesar de la derrota y la eliminación copera, El Ideal Gallego publicó que el encuentro entre Deportivo y Real Unión fue “el ‘match’ mejor jugado en la temporada y en muchas temporadas”. Una “hazaña” para el equipo coruñés, teniendo en cuenta el potencial de las plantillas de uno y otro equipo en aquel momento, que supuso el primer partido oficial de un Emery en A Coruña. El primer vínculo de una familia con ADN blanquiazul.
