Derrota y vuelta a las dudas para un Deportivo al que se le está atragantando este final de año. Los coruñeses sumaron su segunda derrota desde que Óscar Cano asumió el mando de la nave blanquiazul y lo hicieron repitiendo, en cierto modo, el guion que les había llevado a la primera derrota del técnico granadino: quedándose con diez.

En el Nuevo Vivero el cuadro herculino perdió por la mínima contra el CD Badajoz, tras aguantar más de media hora con uno menos, por la roja directa señalada a Mario Soriano en el minuto 64 del choque, por una dura entrada sobre Mancuso. Los coruñeses, con diez, aguantaron hasta el último minuto del añadido, cuando cabeceó sobre la bocina Francis Ferrón para darle los tres puntos a los blanquinegros. Los locales consiguieron un triunfo que les permitió escalar cinco posiciones y salir de los puestos de descenso.

Gol tempranero

Contra el Real Madrid Castilla, que supuso el primer traspié como técnico de Óscar Cano, hubo similitudes con el duelo ante los extremeños. Aunque en este caso los de Raúl González ya se pusieron por delante en el marcador en el minuto ocho, por medio de un tanto de Álvaro Martín, los blanquiazules no eran capaces de contrarrestarlo y sufrían, precisamente en el 64, la expulsión por roja directa de Adrián Lapeña. Era la primera de su carrera deportiva, por una falta sobre Álvaro Rodríguez. El Deportivo acabaría claudicando el encuentro, un duelo que, en palabras de Óscar Cano, el equipo no mereció perder y en el que hizo unas declaraciones que le chocaron para muchos, a tenor de lo que había mostrado el conjunto coruñés sobre el tapete de juego. 

Los herculinos tendrán ahora que paliar sendas bajas, en dos posiciones sensibles, el centro del campo y la zaga. En el caso de Soriano, aunque no tiene un recambio específico, se abre la puerta para jugadores como Yeremay Hernández o Víctor Narro, que están teniendo una presencia intermitente en el once herculino.
En lo relativo a la zaga, seguramente regrese Jaime Sánchez al once, tras no estar contra el Badajoz, y le acompañará Pablo Martínez en el centro de la defensa.

Al margen de que jugar un partido con uno menos siempre es un hándicap, no justificó el técnico blanquiazul en su rueda de prensa postpartido ese hecho como detonante de una derrota de la que consideró que fueron justos merecedores. “Han merecido ganar el partido antes del minuto en el que lo ha conseguido”, argumentaba. Un borrón y cuenta nueva de cara al domingo contra el Racing de Ferrol para olvidar la maldición de verse en inferioridad, con diez.