La dureza con la que los jugadores del Racing de Ferrol se emplearon en el tramo final del derbi del pasado sábado todavía dejan sus ecos en la plantilla del Deportivo. O más bien su marca. Uno de los cazados fue Mella, al que David Castro frenó de manera brusca cuando se escapaba en una contra. El extremo tuvo que ser atendido en el terreno de juego y pudo seguir jugando, pero tuvo que ser sustituido poco después por el dolor que más tarde lo obligó a salir cojeando de A Malata. Tres días después, las secuelas del encontronazo todavía se sienten y se espera una semana de máximos cuidados para que el canterano pueda estar disponible contra el Cádiz.

Porque Mella fue una de las ausencias en el primer entrenamiento de la semana. El castigado físico del joven, que apenas ha tenido respiro desde el verano, ha sufrido un contratiempo más después de varias jornadas en las que estaba llegando muy justo a los días de partido. De hecho, venía de ser suplente ante el Cartagena, la primera vez que iniciaba desde el banquillo en Riazor desde enero de 2024.
 

Sin prisa con Obrador

Hay optimismo en que el atacante pueda estar el domingo en Riazor, como también lo hay con el regreso de Rafa Obrador. De momento el lateral también va con calma en su recuperación y realizó con el readaptador el entrenamiento del martes, paso previo a incorporarse al grupo. De cómo responda la rodilla en giros y choques tras los primeros contactos dependerá si vuelve esta semana o le dan una jornada más de descanso. Los otros dos futbolistas que continúan en la enfermería son Sergio Escudero y Juan Gauto. El lateral intercala tareas con el grupo y en solitario, mientras que el argentino trata de volver gradualmente a coger ritmo después de su lesión muscular.

Ante esta lista de bajas, a las órdenes de Óscar Gilsanz siguen Álvaro Mardones y Samu. Los dos canteranos se han asentado en el primer equipo para ayudar en el día a día y estar preparados en caso de que surja alguna emergencia en el lateral derecho o el centro de la defensa.

Jaime se une al grupo

La parte positiva en el aspecto médico la puso Jaime Sánchez. Después de varias semanas cayéndose de las convocatorias por unos problemas físicos que desde el club blanquiazul no se especificaron, el central volvió al grupo y tiene opciones de regresar al equipo para esta jornada.

No está siendo una temporada fácil para el futbolista andaluz, que ha participado poco y ha tenido diferentes contratiempos musculares originados en el día a día que le han cortado el ritmo en varias ocasiones. Idiakez y luego Gilsanz lo han utilizado en momentos puntuales para cerrar encuentros con el marcador a favor, pero siempre en el tramo final. El capitán ha cumplido, bien sea de central, mediocentro o lateral, posición en la que ahora mismo el técnico de Betanzos agradece cualquier ayuda posible tras la lesión de Ximo Navarro. A lo que hay que sumar la importancia de recuperar a uno de los capitanes y pieza clave del vestuario.

Si no hay recaída en los próximos días, Jaime estará listo para medirse al Cádiz en un partido que seguramente sea especial para él. En la cantera del conjunto amarillo dio sus primeros pasos hasta edad juvenil, cuando puso rumbo al Real Madrid.