El Deportivo sumó un sufrido punto en Anduva, donde muy pronto se adelantó en el marcador, vio cómo el Mirandés le dio la vuelta en un visto y no visto ya en la segunda mitad y empató de penalti ya cumplido el minuto 90. El VAR fue protagonista una vez más en un partido de los blanquiazules, ya que intervino en sendos errores no claros y manifiestos —como dice el reglamento— para cambiar la apreciación inicial del colegiado principal.
Óscar Gilsanz cumplió los pronósticos que apuntaban a un relevo en la delantera. Fue el único cambio con respecto al once que derrotó al Cádiz. Barbero volvió al equipo en detrimento de Eddahchouri, titular en las nueve anteriores jornadas. Alessio Lisci, técnico local, suplió la baja del sancionado Juan Gutiérrez con Tomeo como central derecho en su habitual defensa de tres —o cinco, según se mire— y mantuvo a Iker Benito en el carril izquierdo en detrimento de Julio Alonso.
El partido arrancó con un Dépor demoledor. No habían transcurrido 120 segundos desde el pitido inicial cuando Yeremay estrelló el balón en la madera. El canario tiró una pared con Mario Soriano, objeto de claro penalti unas décimas de segundo después de devolverle el balón, y disparó de puntera ante la salida del guardameta, para estampar el cuero en el palo derecho.
Apenas habían pasado otro puñado de segundos cuando Villares inauguró el marcador. Mella sacó de posición al central Víctor Parada y generó un espacio a su espalda que encontró el vilalbés y vio Petxarroman. El pase del lateral derecho lo aprovechó el capitán, que definió en el mano a mano con Raúl Fernández con un suave toque entre el portero y el palo más cercano.
Mario Soriano, en el minuto 7, condujo un contragolpe que él mismo finalizó con un disparo alto. El alcalaíno abrió hacia la izquierda, desde donde Mella centró y el despeje en corto de la defensa le cayó al '21', que empalmó alto. El Dépor controlaba el partido hasta el punto de que sufrió varios córners en contra y faltas colgadas en el primer cuarto de hora y las solventó con inédita solvencia.
Pero este Mirandés parece tener recursos inagotables. Y sin apenas haber incordiado a Helton, estuvo a punto de lograr el empate en un zurdazo lejano de Izeta en el minuto 17. El disparo por bajo del trigoleador en Riazor lo devolvió hacia el verde la base del poste izquierdo. Tres minutos después intentó responder Mario Soriano también desde la frontal del área. El derechazo del Joker, después de un córner a favor de los blanquiazules, se fue desviado.
Alessio Lisci se vio obligado a mover el banquillo antes de la media hora. Tomeo sufrió una lesión abdominal y el técnico italiano suplió pieza por pieza, al dar entrada a otro central, el veterano Postigo.
Poco después de un disparo flojo de Mella en buena posición, llegó la polémica. En el minuto 32 se detuvo el juego por un posible penalti en el área deportivista. El VAR —en el que se sentaba un viejo conocido de los blanquiazules, Ais Reig— llama la atención de Muresan Muresan. Panichelli nota un contacto por detrás de Pablo Martínez y se deja caer. No es un error manifiesto, pero el colegiado valenciano de origen rumano quiso revisar la acción en el monitor. Tres minutos después señala el punto fatídico. Mathis Lachuer, sobrino de Yann Lachuer, también centrocampista del Auxerre que eliminó al Dépor en la primera ronda de la UEFA en 1997, estrelló la pelota en el poste derecho cuando el reloj ya marcaba el minuto 37.
Lisci le pegó un lavado de cara a su equipo tras el descanso. Sacó del campo a Lachuer e Izeta, como si los hubiera considerado gafes por disparar a la madera, e introdujo a Joel Roca y Butzke. Y la jugada le salió redonda, porque los dos, ocho minutos después, resultaron clave en la acción del tanto del empate.
Butzke ganó un balón llovido en la frontal del área, que peinó para Panichelli. El ariete enganchó un zurdazo que repelió el travesaño. El rechace le cayó a Joel Roca que, entre Martínez y Tosic, cabeceó sin oposición y sin portero —Helton se había lanzado a por el disparo del delantero argentino— al fondo de las mallas.
Diez minutos más tarde, otra vez el VAR. Ais Reig reaparece para avisar a Muresan Muresan de un doble error. El árbitro principal indica, a instancias de uno de sus asistentes, un fuera de juego de Joel Roca —otra vez en el meollo de una acción decisiva— que no es. El autor del primer gol local centró raso al área, donde Pablo Martínez despejó y al desequilibrarse agitó su mano izquierda, que impactó en el esférico. El reglamento dice que mano involuntaria tras despeje propio no es penalti. Pero en Anduva y contra el Dépor sí lo fue. Panichelli le quitó el balón de la manos al capitán Reina para hacer su decimoséptimo tanto del curso y adelantar al cuadro burgalés.
Con el marcador en contra, Gilsanz rehizo su equipo con un doble cambio. Por una parte, intentó oxigenar la medular con Mfulu en lugar de un amonestado José Ángel. Por otra, introdujo a Diego Gómez por Tosic, con lo que retrasó la posición de Mella, que pasó a jugar como lateral izquierdo. Por cierto, que nada más saltar al césped, el internacional congoleño ya vio una tarjeta amarilla.
Ais Reig no intervino, sin embargo, en el minuto 76, cuando Butzke estuvo a punto de tronzar el tobillo de Pablo Vázquez. El delantero del conjunto burgalés controló largo un balón, al que llegó antes el central deportivista, que sufrió un pisotón que veremos si no le acarrea consecuencias de cara al próximo compromiso. El gladiador valenciano realizó ostensibles gestos de dolor aunque, demostrando su fortaleza y compromiso, acabó el partido.
La entrada, justo después de esa acción, de Eddahchouri por Petxarroman dejó un Dépor un tanto experimental: Villares de lateral derecho, Mella en el izquierdo, Mfulu y Soriano en la bisagra, Yeremay y Diego Gómez en los extremos y el neerlandés junto a Barbero en una poco común dupla de ataque.
El Dépor, que durante más de 40 minutos xde la segunda mitad apenas pisó el área local, sí empujó en el tramo final. Diego Gómez disfrutó de la mejor oportunidad coruñesa, en el minuto 88, en un disparo cruzado que se fue fuera por centímetros tras una conducción y servicio hacia el extremo derecho de Barbero, en su última acción sobre el césped. De inmediato fue sustituido por Herrera.
Instantes después, el Deportivo tuvo la ocasión de arañar un punto de Anduva. Por fin llegó el tercer penalti de la temporada. No disfrutaba de uno el Dépor desde que Yeremay lo mandó al larguero hace casi tres meses en Tenerife. Egiluz agarró a Eddahchouri cuando intentaba cabecear un centro de Diego Villares. Yeremay, ya superado el minuto 90, tomó la responsabilidad. El '10' engañó a Raúl Fernández para anotar su segundo penalti en tres intentos y su duodécimo tanto en la presente campaña.
Pero el partido no había acabado. Ocho minutos añadió el árbitro después de su largo visionado de la mano de Martínez. Tampoco pasó demasiado tiempo para que el deportivismo volviese a sufrir. En el segundo minuto del añadido, Helton sacó una mano salvadora en un testarazo de Panichelli en una falta colgada al área por Reina. De todos modos, ahí se acabó el Mirandés. Los blanquiazules contemporizaron los otros seis minutos de prolongación para arrancar por primera vez un punto en cuatro visitas ligueras a Anduva y mantener su idilio con la equipación amarilla de la pasada temporada, ya convertida en un talismán.
Mirandés 2 - 2 Deportivo |
Mirandés: Raúl Fernández; Hugo Rincón, Tomeo (Postigo, m.28), Egiluz, Víctor Parada, Iker Benito (Ander Martín, m.90+1); Reina, Gorrotxategi, Lachuer (Butzke, m.46); Izeta (Joel Roca, m.46) y Panichelli
Deportivo: Helton Leite; Petxarroman (Eddahchouri, m.77), Pablo Vázquez, Pablo Martínez, Tosic (Diego Gómez, m.68); Diego Villares, José Ángel (Mfulu, m.68); Mella, Mario Soriano, Yeremay; y Barbero (Herrera, m.88)
Goles: 0-1, m.3: Diego Villares. 1-1, m.53: Joel Roca. 2-1, m.63: Panichelli, de penalti. 2-2, m.90+1: Yeremay, de penalti
Árbitro: Muresan Muresan (C. valenciano). Tarjeta amarilla a José Ángel (m.4), Tosic (m.18), Postigo (m.42), Mfulu (m.69), Butzke (m.76), Hugo Rincón (m.80), Barbero (m.83) y Egiluz (m.90)
Incidencias: Partido de la 35ª jornada de Segunda División disputado en Anduva ante 4.602 espectadores. |