Los caprichos del destino han querido que el Algeciras se juegue este sábado seguir en Primera Federación ante el Real Madrid Castilla, que se disputa con el Depor el tercer puesto, y precisamente fue el equipo que le privó el curso pasado, con polémica incluida, de disputar el playoff de ascenso a los albirrojos.
Hace justamente un año el Algeciras perdió sus opciones de jugar la fase de ascenso en el Nuevo Mirador contra el filial blanco (1-1) en un partido en el que los locales reclamaron alineación indebida del Castilla. Un recurso que en su momento fue desestimado por el Juez Único de Competición, el de Apelación y finalmente el TAD.
Los de Iván Ania consideraron que el filial cometió alineación indebida tras la expulsión de Antonio Blanco, momento en el que se quedaron con nueve jugadores y solo seis de ellos con ficha de la plantilla del filial.
Los tres restantes eran juveniles. Al darse cuenta, el Castilla retiró al juvenil Villar por Jaume Jardí. El Algeciras denunció, pero todas las instancias adujeron que el balón no se puso en juego mientras estuvieron esos seis.