El Deportivo perdió en verano un capitán y un referente dentro del campo con la retirada de Álex Bergantiños (A Coruña, 1985) pero, con su nombramiento como miembro del Consejo de Administración, ha ganado un nexo de unión entre Abegondo y la Plaza Pontevedra. Además, Álex ha actuado como portavoz del club, una figura demandada en los últimos años, durante los primeros meses de este curso y así lo ha demostrado en la segunda parte de la entrevista concedida para el ‘podcast’ de este diario, centrada en la actualidad del equipo blanquiazul.
Yeremay, Mella, Barbero, Ximo... Si seguimos así, tienes que volver a vestirte de corto.
Sí, han coincidido un mogollón de problemas de lesiones, incluso la sanción de Lucas. El mayor problema es que son casi todas en ataque. Nos quedamos ahí un poco cortos, pero son cosas que no puedes controlar. La parte no mala es que ha sido ahora al principio de temporada y no más adelante cuando se define todo.
Teniendo en cuenta estas bajas, ¿de verdad no tenías gasolina para aguantar una temporada más?
No lo sé, estaba muy en el límite. Ya en la temporada pasada había contado muy poco e iba físicamente más justo. Me entró la duda con el playoff al volver a participar, pero tenía el miedo de que igual empezaba, pero en diciembre me iba a arrepentir. Entonces, hablando con Soriano vimos todos que esto era lo más sensato. Hay que saber en qué momento dar un paso a un lado para no sentir que estoy estorbando. No quería vivir eso. Estoy satisfecho con cómo ha sido el momento. Ojalá hubiera sido con un ascenso pero eso no lo puedes decidir. A lo mejor podría haber jugado quizás en un equipo con menos exigencia, pero no me veía con capacidad mental para jugar en un club que no fuera el Depor. No me veía con esa energía.
Tenía el miedo de que igual empezaba, pero en diciembre me iba a arrepentir
¿Crees que hay que recurrir al mercado para paliar la ausencia de Barbero?
Este verano he estado ahí con Soriano viendo lo difícil que es ser director deportivo. Es uno de los escenarios, pero está difícil. Acudir al mercado de jugadores en paro siempre tiene limitaciones, porque son jugadores que están sin ritmo competitivo, que son un poco más lotería. Y también la apuesta desde el principio era buscar rendimiento en nuestra cantera, que está en un muy buen momento y el primer equipo está en el peor de su historia. La distancia es la más corta que puede haber y ahí tanto la dirección deportiva como el entrenador sí que están apostando. Si sale una oportunidad grande, entiendo que Fernando la intentará aprovechar, pero tenemos gente de capacidad para jugar arriba. Y a ver si las lesiones de Yeremay y Mella se acortan lo máximo posible.
Qué lástima esas lesiones de Yeremay y Mella, con lo bien que habían empezado.
Sí, nos hace daño sobre todo en la izquierda. Son dos canteranos que están dando un nivel óptimo y justo se caen los dos. Esperamos que puedan regresar lo antes posible y que sean más piezas para que Davo, Lucas, Valcarce y los jugadores de segunda línea sumen esos goles necesarios. Tenemos gente importante que puede hacer goles y gente que se puede adaptar a la posición de punta. Lógicamente Barbero era el ‘9’ referencia pero Martín tiene condiciones diferentes y también tiene muchísimo gol.
¿Te gusta la plantilla que se ha armado esta temporada?
Sí, es una plantilla muy completa. Se está viendo en los primeros partidos una sensación de solidez que es lo más difícil de encontrar cuando construyes un equipo. En los últimos años tuvimos plantillas con apariencia de mayor brillo individual, con jugadores más técnicos o de calidad, y nos costaba más ser un bloque. El enfoque ha cambiado aprovechando dónde están los mejores jugadores de la base, que ahora es en las posiciones de arriba. Entonces, se ha buscado ser sólidos detrás, construir con gente que se le presupone un rendimiento inmediato y con experiencia y luego arriba dar espacio a donde tienes el talento ahora mismo.
Yeremay parece un chico diferente del que teníamos hace dos años, no ha tenido una infancia fácil
Da la sensación de que este año los jóvenes sí pueden tirar la puerta abajo.
Sí, es su momento y tienen que aprovecharlo pero lo importante es que vaya habiendo cada vez más y haya referentes. Ahí también pondría a Villares, que quizás es un poco olvidado porque fue un poco más Álex Bergantiños en ese sentido. Salió cedido y llegó al primer equipo con 23 o 24 años. Eso tiene que servirnos de aprendizaje a todos, a los aficionado también, de que cada chaval lleva su proceso. Los hay que necesitan quemar etapas más despacio y otros que aparecen de repente. Estamos muy contentos con lo que están aportando. Yeremay parece un chico totalmente diferente del que teníamos hace dos años. Es un chico que ha tenido una infancia no fácil y le ha costado adaptarse a lo que es un vestuario profesional. Eso también es mucho mérito de toda la gente que ha peleado con él todos estos años. Hay un trabajo ahí detrás de mucha gente anónima que tiene muchísimo mérito. Es a ellos a los que más les reconforta cuando llega un chaval y da ese rendimiento en el primer equipo porque hay mucha inversión detrás, ya no solo de dinero, sino de tiempo y esfuerzo.
¿Qué sensaciones te ha dejado el equipo en estas cuatro primeras jornadas?
La sensación que tiene el aficionado, que tenemos menos puntos que méritos. Ha sido un arranque un poco accidentado. El primer partido en Riazor nos ha faltó acierto y el estado del campo nos perjudicó un poco contra un equipo tan encerrado. Y el partido del Teruel se complica con la expulsión de Lucas pero que con diez no te tiren a puerta en todo el partido habla muy bien de cómo está trabajando el Depor. En ninguna división es fácil ver algo así. Es esa sensación de que hay un bloque sólido, solo nos han metido un gol en una acción muy puntual. Falta la otra parte que es crecer con resultados. La única duda que me puede generar estos partidos es que la gente se empiece a poner nerviosa. Hay cosas que mejorar pero hay unas bases sólidas que no debemos perder.
Tuvimos plantillas con apariencia de mayor brillo individual y nos costaba ser un bloque
¿Cuál es el principal error cometido en estas últimas campañas para que el Depor siga en la tercera categoría?
Son varios. Ascender es complicado en cualquier división. La reestructuración de las categorías en el primer año nos pilló con el pie cambiado, con el COVID y demás, y luego se han ido haciendo proyectos de intento de ascenso pero nos hemos quedado a las puertas. Equipos con menos exigencia como el Racing de Ferrol, Alcorcón o Racing de Santander han manejado mejor que nosotros ciertas situaciones y nos hemos quedado en el camino. Ahora lo que tenemos que transmitir es esa garantía de que esto es un proyecto estable. El objetivo primordial es ascender lo antes posible pero sabiendo que esto es difícil y dando tranquilidad a las personas en las que hemos depositado la confianza. Creo que lo acabaremos consiguiendo.
¿Qué es lo que más te impulsa a pensar que este curso por fin va a ser el último en Primera Federación?
El clima que estamos generando tanto en Riazor, con récord de socios, como con las sensaciones que transmite la plantilla, que está siendo muy sólida. Invita al optimismo. La experiencia de llevar tantos años en la misma división nos va a servir a todos, a los que estamos trabajando en el club, al aficionado, a los medios, a todos, para saber en qué escenario estamos y conocer los problemas que nos vamos a encontrar. Ya las hemos vivido de todas las maneras, ya hemos pasado por todos los escenarios negativos. Más preparados que el club y la afición del Depor no va a estar nadie.
¿Quién o quiénes te pueden sacar de esa lista de los jugadores con más partidos en el Depor? ¿Villares?
Ojalá. Si es Villares y además subiendo divisiones, como me pasó a mí, sería un ejemplo perfecto de que las cosas se están haciendo bien y de que seguimos teniendo jugadores con arraigo y representatividad respecto al Depor, la cantera y la ciudad. Ojalá me acabe superando. Sería un orgullo porque es muy amigo mío, un chico excepcional, muy humilde también. Ojalá le vaya bien a él y si no, a los que vienen detrás. Si tiene que ser Barcia, que lleva 15 años en el Depor, también sería otro buen ejemplo. O Mella o Yeremay. Ojalá hagamos proyecto y generemos ese arraigo para que los niños coruñeses tengan ídolos que sean representativos.
El criterio arbitral y la dureza de los rivales han sido dos focos de preocupación para el deportivismo en las primeras jornadas, aunque Álex Bergantiños destaca que es algo que ya viene de temporadas pasadas.
Soriano, Idiakez y algunos futbolistas se han quejado por el criterio arbitral en este arranque de curso.
Los árbitros, sobre todo en Riazor, vienen muy condicionados de antemano
¿Cómo lo has visto tú?
Hemos sido perjudicados. Todo el mundo se queja porque el nivel de los arbitrajes en la categoría es limitado y sin el VAR se multiplica más. Lo que nos cuesta comprender es esa sensación que se está eternizando de que los árbitros, sobre todo en Riazor, vienen muy condicionados de antemano. Piensan ‘Riazor no me va a poder’ y están de los nervios. Y lo hacen al revés, lo hacen peor. ‘No vaya a ser que le pite un penalti al Depor que no sea’, ‘no vaya a ser que no expulse a este’... Y al final acaban expulsando al del Depor pero al otro no le echan amarilla o van a hacer la primera advertencia por pérdida de tiempo en el minuto 93. Eso fue cómico el otro día. En el 94 claro que va a ser la última. Se está instalando la idea en los equipos de que es fácil hacer eso y te cuesta poco peaje. Hablo de la entrada de turno o la pérdida de tiempo de turno. El partido contra el San Fernando del año pasado fue bochornoso. Se hace un flaco favor a la competición.
Ya van 108 partidos seguidos sin que a un rival del Depor lo expulsen por roja directa por una entrada dura o acción peligrosa.
Se me viene a la cabeza la patada a Quiles en Córdoba. Tienen esa sensación, que quiero pensar que es inconsciente, de decir ‘no lo voy a expulsar porque va a parecer que favorezco al Depor, que es el grande de la categoría’. Y para que no parezca que lo favorecen, quieren ver otra cosa. Están generando decisiones que nos están perjudicando mucho y están generando crispación en nuestra afición porque son muy evidentes. Tienen que aislarse y ser imparciales. Eso sería lo ideal pero lógicamente son humanos y en esta categoría se acentúa más porque no están acostumbrados a ser mediáticos. Están mucho más nerviosos de lo habitual. En Primera o en Segunda ves que los árbitros hablan contigo y están tranquilos. Aquí, les ves la mirada y están de los nervios.
También te has quejado por la retransmisión de FEF TV.
Llevamos unos años... Ya no sabes ni de qué darte de alta. No sabes que hacer con este cristo que tienen montado. Centralizar los derechos en esta división para que la Federación reparta... Creo que está mal pensado el formato. Si te abonas a una plataforma de Primera RFEF es para ver solo a tu equipo. Esta venta centralizada es un poco extraña y no da el nivel. Los partidos se cortan, las cámaras son las que son, muchas veces la realización es automática y no ves ni la repetición... Ojalá escapemos pronto de esto.
La imagen de Álex Bergantiños preside una de las lonas promocionales de ‘O Noso Deporte’ y dxt campeón en el Palacio de la Ópera, donde está situada la redacción de este periódico deportivo. El coruñés sigue siendo un referente en la ciudad aunque recalca que hay posibles relevos.
“Mi hija preguntó por qué está esa lona, si papá ya no juega’”
¿Te has fijado en la lona gigante que hay aquí fuera?
Sí, me lo dicen mis hijos todavía. De hecho, mi hija me preguntó que por qué está todavía ahí si papá ya no juega.
¿Entonces qué hacemos? ¿La podemos dejar o ponemos a Villares, a Lucas o a otro canterano? ¿Qué hacemos?
Ahí ya no sé. Hay que mirar a los nuevos ídolos. Por ejemplo, en la Deportienda todavía hay alguna camiseta con mi nombre, pero vas allí y todo es Yeremay, el año pasado Soriano... La gente joven busca nuevos referentes y es ley de vida. Yo estoy orgullosísimo de que la dejen ahí todo el tiempo posible, pero si hay que vender la camiseta nueva, teniendo en cuenta que ahora la parte de directivo también me interesa (ríe), ponemos la de Villares o Lucas o el que más impacto tenga. No me va a parecer mal que la quitéis, que ya lo he disfrutado. Ahora le toca a otros y ojalá nos mantengan Riazor con ese ambientazo.
Hablando de ese ambientazo, es increíble que se estén rozando los 28.000 socios y que muchos de ellos sean jóvenes que solo han vivido una época muy dura.
Sí. También es un poco mérito de nuestra generación, los que somos padres ahora. Es una idiosincrasia diferente aquí en la ciudad, que todo gira en torno al Depor, y lo hemos transmitido a los más pequeños. Va más allá de lo puramente futbolístico, es algo social. Eso de ‘nas malas, moito máis’. Es ese sentimiento que tenemos gente de mi generación que las hemos visto de todos los colores, pero es lo nuestro y lo vamos a defender siempre, más allá de que te quieran meter por los ojos la liga árabe o cosas de estas. Aquí tenemos lo nuestro y la gente se ilusiona con la pretemporada del Depor, la camiseta del Depor o los fichajes del Depor, sea la división que sea. Tenemos que cuidarlo y también es nuestra responsabilidad cuidarlo desde la directiva porque es fundamental para que esto se mantenga vivo.