Los daños colaterales de la derrota del Deportivo ante Unionistas (2-1) van más allá de la pérdida de puntos y el haber caído a la cuarta plaza. Los coruñeses tendrán que estar pendientes de Alberto Quiles, que se tuvo que retirar antes, en el 90 de la contienda, debido a molestias musculares.
"Quiles tenía una molestia en un gemelo, casi no podía ni correr y optamos por Max (Svensson) a tumba abierta", admitió el preparador granadino en la sala de prensa del Reina Sofía. También tendrá que estar pendiente el club de los partidos de sanción que le pueden caer a Roberto Olabe, más allá de la expulsión, por romper la puerta del vestuario del campo charro.