El Silva sigue sin certificar la permanencia. La tercera derrota consecutiva del equipo de Javier Bardanca, que tiene siete puntos más que el Juvenil –marca el descenso directo– a falta de tres jornadas para que termine la liga, estuvo condicionada por la expulsión de Fiuza en el 25 con 0-0 en el marcador. Jerín marcó el 0-1 en esa misma falta y Gabri Palmás, en el primer minuto de la segunda mitad, el 0-2. El conjunto coruñés no dejó de intentarlo y Antón recortó distancias en el 83, lo que provocó que hubiese emoción hasta el minuto 95.
Javier Bardanca –también vio la roja directa después de la expulsión de Fiuza– y Rubén Domínguez apostaron por el mismo sistema (1-4-4-2). Los locales, con dos delanteros corpulentos: Joao y Dembelé. Los visitantes, con dos puntas de velocidad: Gabri y Amin.
Antes de la jugada clave, hubo aproximaciones en las dos áreas. La más clara del Silva no llegó a ser ocasión. Fue en una buena conducción por dentro de Álex Lorenzo. A la altura del borde del área metió un pase interior con la zurda que Joao no entendió. El Ourense tuvo tres prácticamente seguidas de Rubén Sánchez, Jerín y Tiago a las que respondió Ríos con buenas intervenciones.
En el 25 se produjo la jugada que marcaría el desenlace del encuentro. Balón directo del Ourense a campo contrario que quedó suelto para que lo recogiese Amin, que inició una carrera fugaz colándose entre la pareja de centrales del Silva. El delantero visitante, mucho más rápido, fue derribado por Fiuza cerca del borde del área. Iglesias Melón no lo dudó ni un instante: roja directa. ¿Quizá hubiese sido suficiente con una tarjeta amarilla?
Con la expulsión no terminaría el colmo del Silva. Dos minutos después, cuando se reanudó el juego, Jerín puso por delante al Ourense transformando en gol esa misma falta que había cometido Fiuza. Lanzó por el palo del portero, un Ríos que estaba demasiado centrado, prácticamente detrás de la barrera. La pelota entró rasa: 0-1.
El Silva no tardó en reaccionar a la roja y Xusto entró por Dembelé en el 33 para recuperar el equilibrio y pasar a jugar con un 1-4-4-1 el último cuarto de hora del primer acto, en el que Amin estuvo a cerca de marcar un golazo de chilena y en el que Gabri tiró al palo.
Precisamente Gabri, en el primer minuto de la segunda parte, haría el 0-2, un auténtico golazo de volea desde la frontal que, por otra parte, contó con la fragilidad defensiva del Silva en un balón frontal, un despeje de Marqueta.
Pasó el Silva a 1-4-3-2 primero con Joao y Álvaro en punta y después con el propio Álvaro y Antón Garda, que daría vida al partido anotando el 1-2 en el 83 con un tiro cruzado desde dentro del área que arañaría el palo antes de entrar. Lo intentó sin éxito el conjunto de Bardanca hasta que el árbitro dio el último pitido superado el minuto 95.