El Deportivo Liceo abre esta tarde su temporada oficial con la disputa de la primera semifinal de la Supercopa, en la que se medirá al CH Caldes en Noia, escenario de su segunda y última conquista de este título, lograda hace tres años.

El vigente campeón de la Copa del Rey llega a la cita con un importante y exigente bagaje de pretemporada: varios enfrentamientos contra los mejores equipos de Portugal, en los que los pupilos de Juan Copa mostraron un excelente nivel, a pesar de que los dos nuevos, Alex Rodríguez –máximo goleador y MVP de la OK Liga 2020/2021– y Jordi Burgaya, van entrando poco a poco en dinámica, no lo han hecho de golpe desde el primer día.

Una sola novedad

La mitad de novedades que el cuadro verdiblanco presenta su rival de hoy. El exliceísta Sergio Miras se ha ido al Calafell y en su lugar ha llegado, procedente del Girona, Xevi Gurri.

El grupo que gestiona Eduard Candamio, tercero en la pasada competición liguera (19 victoria, 5 empates y 6 derrotas), donde terminó a 14 puntos del Liceo y a 21 del campeón, el Barça, tuvo el ‘honor’ de frenar el mejor arranque liguero de la historia del club herculino. Fue en la jornada 13 (mal número), a la que el Liceo llegaba con pleno de triunfos. Racha que vio interrumpida por mor de un empate a tres tantos en Riazor.

El Liceo se vengaría ganando en Caldes (2-3) en la antepenúltima jornada y, lo que es más importante, batiendo a los de Candamio, por 4-1, en semifinales de la Copa del Rey celebrada en A Coruña.

Tres partido con un denominador común: las dificultades del equipo verdiblanco para deshacerse del auriazul, en cuyas filas destacan, por encima del resto, Ferrán Rosa (22 tantos en la última OK Liga), Álvaro Giménez (18) y Cristian Rodríguez (16). Gurri anotó 11 con el Girona.

El ganador de este duelo, que se presenta de nuevo nivelado, se medirá mañana (19.45 horas) al que salga airoso del que a las 21.00 de hoy librarán el anfitrión, el CE Noia, que celebra los 40 años de su pabellón y presenta como gran novedad a un ex capitán del Liceo, Jordi Bargalló, que a los 41 años, y después de cinco en Portugal, regresa a España.

El defensor del título, por su parte, se presenta sin ningún jugador nuevo y sin Sergi Panadero, baja por un traumatismo ocular sufrido esta misma semana en un entrenamiento. Si podrá estar –era duda– Sergi Llorca, quien ocupará el hueco dejado por otro ex del Liceo, Pablo Álvarez. Después de diez temporadas de azulgrana el delantero argentino no llegó a un acuerdo para renovar su contrato y optó por fichar por el Benfica.