El CB Maristas afronta mañana su primer compromiso de pretemporada. En el marco de la Copa Galicia, las coruñesas reciben a las 19.00 horas al Cortegada de Vilagarcía.

Un choque que supone el debut de Esther Muñiz al frente del banquillo colegial. Por ello, la entrenadora reconocía ayer que va a ser un partido especial, tanto para ella como para el resto de jugadoras y cuerpo técnico.

Además, Muñiz comenta que va a poder contar con toda la plantilla. “El martes llegó Amy Griffin, y así ya estamos todas”, indicaba.

Maristas lleva trabajando desde junio, “haciendo una sesión semanal, antes de comenzar la pretemporada el 23 de agosto”.

continuidad

“Mantener el bloque del año pasado es tener el 40% del trabajo hecho” 

De ahí que señale que “es un partido que nos viene demasiado pronto. Voy a darle minutos a todas las jugadoras. Se trata de dosificar y rotar”.

Independientemente del resultado o de la fecha, Esther Muñiz resalta que “nos hace ilusión volver a competir con público. En los partidos del año pasado casi no había gente. Y creo que los aficionados también tienen ganas de ver baloncesto, y también al equipo y a los nuevos fichajes.

A nivel más personal, el duelo de mañana supone para ella un reto ilusionante, por el hecho de “afrontar el primer partido con Maristas, 25 años después de haber estado aquí. Y también para mi segundo, Pablo, que estuvo en el Cortegada”.

Buen ambiente

“Tienes esas mariposas en el estómago. Sentarse en el banco de uno de mis equipos será un momento especial”, destaca. Al mismo tiempo, incide en que “el ambiente en el equipo es fenomenal. Todas estamos muy comprometidas. Va a ser un partido muy especial para todas. Estamos deseando que llegue el domingo”. El Cortegada será también uno de los rivales de la temporada en la Liga Femenina 2.

“Tiene una plantilla diferente a la del curso pasado. Pero sigue basando el juego en su base, Sara Gómez. De todas formas, me preocupa más mi equipo... Que los sistemas que hemos entrenado salgan y que podamos defender”.

Esther Muñiz es nueva en Maristas, un equipo que mantiene el bloque de la pasada campaña. “Los únicos fichajes han sido Paloma, Xiana, que ya estuvieron en el equipo, y Amy. Es fundamental que se mantenga el bloque, en este caso, siete siete jugadoras. Supone tener el cuarenta por ciento del trabajo hecho. Eso sí, ahora tienen que habituarse a cómo hago yo las cosas”, indica la entrenadora.