Lo del Victoria no es casualidad. Lo de Diego Armando García, tampoco. Sáquenselo de la cabeza. Es muy difícil tener suerte en seis partidos cuando eres un debutante en la categoría. Es muy complicado que el futbolista más vigilado por los rivales siga marcando goles. Es un hecho que el Victoria se ha presentado como un de los grandes candidatos a optar a la fase de ascenso –es segundo clasificado y lo será cuando termine la primera vuelta a pesar de descansar en la última jornada–. La victoria, nunca mejor dicho, del pasado domingo en el campo del Atlético Arteixo, que a pesar de su situación clasificatoria es uno de los equipos más temidos, hace que el conjunto blanquinegro asegure el segundo puesto hasta que empiece la segunda vuelta.

Ha ganado cuatro partidos, ha empatado uno y solo ha perdido uno. El Victoria empezó la liga a lo grande, probablemente sin darse cuenta de que estaba en otra categoría porque la dinámica era la misma que cuando arrasó la pasada temporada en la Primera Galicia. El cuadro de Diego Armando García se impuso por 2-1 al San Tirso en San Pedro de Visma, una de las novedades (y no precisamente porque quieran cuerpo técnico y jugadores) que presentó el Victoria esta temporada: su campo como local.

5 puntos

El Victoria, segundo, tiene cinco puntos de ventaja sobre el tercer clasificado, un Monta que visitará al Sofán el próximo domingo.

En la segunda fecha, en el Municipal da Laracha, que había protagonizado la gran sorpresa de la primera jornada empatando (0-0) en Ponte dos Brozos contra el Arteixo, sentenció el encuentro en 20 minutos. Goles de Edu y de Raña, como en la primera jornada.

En la tercera probó el sabor de la derrota años después. El Sofán, en el partido entre semana, se impuso por 0-1 en Visma. La única mancha del equipo de Diego García en lo que va de curso.

Los tres últimos

La derrota hizo reaccionar al Victoria y, acto seguido, llegaron siete puntos de nueve posibles. El tercer triunfo de la temporada fue en el derbi contra el Montañeros. 1-2 con dos penaltis que transformó Edu. La semana siguiente, el Victoria no pasó del empate en casa (1-1) contra el Betanzos, su gran rival de la pasada campaña en Primera. Y la última, la del Arteixo, ya es conocida. 1-2 con remontada incluida y doblete de Raña.

El próximo fin de semana será de descanso para el Victoria, que tendrá más tiempo para preparar el encuentro del miércoles de la próxima semana ante el San Tirso con la tranquilidad de que, haga lo que haga el Montañeros, seguirá en la segunda plaza.