El Deportivo afronta la semana sin fútbol con un nuevo inquilino en la enfermería. El club, a través de un parte médico, dio a conocer el alcance exacto de la lesión de Héctor Hernández, que se había lastimado el pasado fin de semana en Barreiro ante el Celta B y todo apuntaba a un problema muscular.
Se cumplieron los pronósticos y el lateral pucelano sufre una lesión muscular en su muslo derecho.
En el parte médico el club no especifica el grado, pero a tenor del tiempo de recuperación que suelen tener este tipo de dolencias, el jugador puede ser baja de cara al trascendental encuentro del próximo domingo 28 ante el Zamora. El club apunta que “estará unos días con tratamiento médico y de fisioterapia” y tendrá que completar una readaptación física antes de volver a trabajar con el grupo.
La última lesión del vallisoletano se remonta a principios de año, cuando padeció una dolencia en el semitendinoso de su pierna derecha.
Esta baja se une a otra que se conoció ayer, la de Mujaid Sadick. Según informó el Depor, el central riojano estará hasta mediados de la próxima semana con entrenamiento específico en su domicilio por el contacto con un caso de coronavirus. Ante la baja de larga duración de Derik Osede, que sufrió la rotura del tendón de Aquiles de su pierna derecha, Rubén de la Barrera solo cuenta actualmente como central puro del primer equipo con Borja Granero.
Enfermería
Además de estas dos bajas ayer no se entrenó con sus compañeros José Lara, que el martes se llevó un golpe en la rodilla, ni Celso Borges, que continúa recuperándose de una lesión muscular en los isquiotibiales de su pierna izquierda.
El mediocentro costarricense, que realizó carrera suave ayer junto al readaptador Fran Molano, series de esprints y estiramientos, es también duda de cara al choque ante los zamoranos.