Ahora, cuando veo jugar al fútbol y cuando analizo lo que hay alrededor, trato de diferenciar mi punto de vista. Unas  veces lo hago sólo como espectador y otras, la mayoría, como entrenador. Son dos puntos de vista distintos que me ofrecen dos ópticas también muy diferentes y de las que obtengo conclusiones muy dispares. No es fácil separarlas, pero me motiva poder hacerlo para conseguir otro tipo de análisis individuales y colectivos, que comparto sin más intención, como siempre, que la de debatir.

• Jémez perdió un set en Girona y ganó tres puntos ante el Valencia. Juega a la ruleta rusa a tumba abierta y eso le hace peligroso para él mismo pero, ojo, también para sus rivales.
• One me convenció dos veces: en el terreno de juego y, sobre todo, ante los micrófonos, que NUNCA debieron apuntarle a él de primero.
• Gran ambiente de fútbol el que respiré el domingo en Abegondo. Me gusta esa comunión que se respira con el filial y sus futbolistas.
• Al mejor de la historia sólo le haría una pregunta: usted, ¿juega pensando o piensa  jugando?
• Un futbolista con iniciativa, calidad, claridad y personalidad jugó el domingo en Abegondo. Llevaba brazalete en brazo y batuta en mano. La madurez le ha mejorado. Pablo Rey, nada más que comentar.
• Duele más ver a siete futbolistas sin orgullo que siete goles en el casillero del marcador del rival.
• A Eusebio le ponen en duda por lo mismo que pusieron a Unzué nada más llegar. Ahora Unzué respira y Eusebio contiene el aire. El mismo fútbol, distintos contextos.
• Cristiano se resumió a sí mismo cuando le pidió el móvil al doctor. Es lo mismo que cuando pide una falta escorada y a 40 metros de la portería; no procede pero se situó en el centro de la escena.
• Çolak es un futbolista que me gusta... Cuando el viento da de cola. 
• Hay un entrenador catalán en Inglaterra. Su equipo ha encajado 18 goles en 24 partidos y ha metido 70. Debería estar prohibido ser romántico y combinativo porque esos no son 'ganadores'.
• Cristóbal en el Bernabeu me recordó a una canción de Sabina,  "calla más de lo que dice, pero dice la verdad".
• Hace años, en la presentación de cualquier futbolista, si intentaba malabares decorativos y le caía el balón, se le tildaba de paquete. Ahora no hace falta esperar a ese momento, ahora tenemos Twitter.