El ourensano Diego Seoane es uno de los nombres propios del derbi del sábado con el Racing de Ferrol. El lateral derecho, con pasado blanquiazul, se enfrentó por primera vez a su exequipo el pasado 29 de noviembre. El zaguero formó en el once que cayó en Riazor (1-0) con un gol de Diego Rolan de penalti en el que fue el estreno del uruguayo con la camiseta del Deportivo. El defensa de 32 años sueña con quitarse, en A Malata, el sabor amargo que le dejó su primer duelo con la escuadra coruñesa.

¿Qué recuerdas de tu primera visita a Riazor como rival?

Bien, descafeinada porque no fue con público. Sí que viví un reencuentro con Álex Bergantiños, con gente del club, con Fernando Vázquez y, en cuanto a lo futbolístico, creo que pudimos hacer algo más y perdimos, entonces, no guardo un buen recuerdo del partido. Espero que ahora, en esta segunda vuelta, jugando en casa, todo cambie.

Donde sí habéis cambiado los dos equipos es en el banquillo, ya que, en lugar de Larraz y Fernando, ahora están Cristóbal y De la Barrera.

Sí, está un poco revuelto esto en esta época. El tema de los resultados influye y a veces hay que darle una vuelta de tuerca y que los cambios influyan para bien. Nosotros lo que queremos es quedar lo más arriba posible, que nos queda poco y tenemos que intentarlo. Lo que quiero dejar claro es que el entrenador anterior también puso su granito de arena.

Cinco de los diez equipos del grupo han cambiado de entrenador. ¿Qué te dice ese dato?

Es que este formato nunca se dio y entonces hay menos paciencia en cuanto a resultados. Además, pierdes dos partidos y te puedes meter abajo, entonces es una visión que puede influir, que te veas en puestos de descenso.

Bueno, el Depor destituyó a Fernando Vázquez con el equipo clasificado en el segundo puesto. ¿Te sorprendió?

Es difícil que pasen esas cosas en un equipo que va segundo, es difícil verlo y creerlo, aunque creo que tanto Fernando Vázquez como De la Barrera son dos buenos entrenadores. Pero sí que cuesta creer que el club tomara esa decisión por la posición que ocupaba el equipo en el grupo.

Sobre todo porque las cosas no han mejorado mucho desde entonces.

Es que es difícil porque cuando entras en una dinámica en la que las cosas no van en un club, hay que cambiarlas y es complicado porque es un club que no está acostumbrado a estar en esta situación y cambiarlo es difícil. Eneko Bóveda lo explicó de diez la semana pasada.

No ayudan tantos cambios de entrenador y de presidente como ha vivido el Depor en los últimos años, parece un club sin rumbo.

Sí, creo que en todos los proyectos o instituciones para que haya un futuro se necesita estabilidad y es verdad que hubo muchos movimiento en estos últimos años. Espero que encuentren una estabilidad para mejorar porque es lo que hace falta en el Deportivo.

Al margen de la derrota en el derbi de Riazor, ¿qué te marcó más de aquel partido?

Es que tengo que quedarme con lo deportivo y me quede jodido porque me fui a casa perdiendo y también porque teníamos que haber hecho más daño en Riazor, les teníamos que haber forzado más.

Los diez primeros minutos del Depor fueron de lo mejor de la temporada, pero luego se diluyó, se limitó a defender y acabó sufriendo.

Fue un partido muy plano, sin muchas ocasiones, sin muchas situaciones de desborde. Te quedas dolido porque necesitábamos forzar más a ese Depor. Es verdad que en ese momento era un bloque muy fuerte en defensa y era difícil hacerle daño.

Ahora tenéis un técnico con pasado blanquiazul, como Cristóbal Parralo, con el que os estrenasteis el pasado domingo ante el Compos. ¿Qué tal las primeras sensaciones?

Ahora tiene que ser racinguista (se ríe). Creo que hicimos una muy buena primera parte, fuimos muy agresivos con y sin balón. En la segunda mitad comenzamos un poco más flojos y hasta que metieron el gol, fueron un poco más protagonistas ellos, pero quitando veinte minutos, creo que nuestro partido fue muy bueno, aunque no nos podemos permitir repetir esos veinte minutos.

Cuando empezó la temporada, erais dos de los máximos favoritos para ocupar las tres primeras plazas del grupo y, sin embargo, ambos llegáis a este duelo sin margen de error para no descolgaros.

Sí, es cierto. Aun así tenemos un partido menos que nos puede situar más arriba si ganamos, pero sí que pensábamos que íbamos a estar más arriba los dos equipos. Nos quedan cinco partidos y creemos en las posibilidades que tenemos, vamos a seguir luchando.

Con De la Barrera al mando, será un Depor distinto al de la primera vuelta.

Igual sí que quieren ser más protagonistas con balón, pero tenemos las armas para contrarrestarlos y nosotros también queremos ser protagonistas, entones nos tenemos que centrar en nuestro juego y, jugando en casa, podemos hacerles daño.

Aunque no os estáis mostrando muy fuertes en A Malata.

En casa estamos pecando de no ser fuertes, de no puntuar, pero creo que debemos y podemos. Viendo la intensidad con la que jugamos, no debe influirnos la trayectoria hasta ahora porque podemos ser fuertes. Es un rival de cerca, tenemos que motivarnos todavía más y tenemos que sacar el partido porque queda poco.

¿Se trata de una final para ambas escuadras?

Esta liga está llena de finales. Ya vivimos situaciones en las que parecía que todo era un ‘match ball’ y el Racing siempre apretó en esos momentos, siempre sacó fuerza para remontar. Es un momento parecido y el Racing va a sacar fuerzas para sacar el partido.

Y más cuando habéis visto que el resto de rivales le han perdido un poco el respeto al Depor a medida que ha avanzado el curso.

En general, respetas la entidad que es el Deportivo, pero en el campo hay que perder ese respeto. No puedes saltar al césped teniéndole miedo ni respeto al adversario. A medida que avanzaban los partidos, los rivales se fueron sintiendo más cómodos y le fueron quitando puntos, entonces, esa es nuestra misión el sábado. Respetamos a la entidad, pero en el campo no se le respeta y vamos a ir a muerte para sacar los tres puntos.

La escuadra coruñesa volvió a ganar el pasado domingo, tras seis jornadas sin conseguirlo. ¿Habrías preferido que llegaran a este derbi sin romper la mala racha?

Creo que nos da igual. Tenemos que afrontar el partido de la misma manera, hayan ganado, empatado o perdido. Seguro que vendrán con un poco más de confianza porque las victorias refuerzan a los equipos anímicamente, pero nos debe dar igual porque estamos en la situación que estamos y necesitamos sumar los tres puntos.

Siempre que hemos hablado contigo, hemos comentado la necesidad que había de que el Deportivo tirara más de su cantera y resulta curioso que en las dos últimas jornadas, los mejores han sido Rayco y Diego Villares.

Conozco a los dos y me parecen buenos jugadores. Creo que están en un buen nivel, es una categoría en la que ambos ya compitieron y no es tanta sorpresa que estén destacando porque ya jugaron en esta categoría.

¿Qué es lo que más y lo que menos te ha gustado del Depor desde la llegada de Rubén De la Barrera?

Están intentando proponer algo más, pero encajaron más goles que con Fernando, entonces, están intentando mejorar en una faceta en la que no eran los mejores. Parece que están progresando, pero eso es algo que lleva tiempo y precisamente, en esta liga no sobra.

¿Qué os ha dicho Cristóbal Parralo y qué vestuario se ha encontrado?

Encontró un vestuario con ganas de cumplir los objetivos. Tuvo poco tiempo para trabajar y preparar el primer partido, fueron entrenamientos intensos, dio las pinceladas que quería y, pese al poco tiempo que tuvimos, creo que las cumplimos contra el Compos. Ahora nos centraremos en aspectos a mejorar.

La afición racinguista se va a perder la oportunidad de vivir el derbi en la grada.

Es una pena no tener a la gente de tu casa apoyándote, seguramente se acercaría mucha gente a este partido. Sí te aporta un plus la gente de casa y es una pena no tenerla achuchando, pero nuestra motivación es la misma.

¿Dónde puede residir la clave para que logréis imponeros en el derbi con la escuadra deportivista?

El Racing va en una dirección de ser protagonista, de ser superior de principio a fin y en eso trabajaremos durante el partido para intentar llevarnos los tres puntos.