El griego Stefanos Tsitsipas vengó este sábado la derrota sufrida ante el ruso Daniil Medvedev en el Abierto de Australia y le doblegó por 7-6(6), 3-6 y 6-3 para clasificarse para su primer final en el Masters 1.000 de Cincinnati, en la que se verá las caras con el croata Borna Coric.
Tras caer en las semifinales de Cincinnati en 2021 y 2020, Tsitsipas tumbó a Medvedev por segunda vez en ocho precedentes en superficie rápida y peleará este domingo por su tercer título del año, después de Montecarlo y Mallorca.
El griego, número siete del ránking mundial, se confirmó como el jugador con más victorias este año (46) en el Tour y también en los Masters 1.000 (19).
Solo una vez había sido capaz de doblegar al número uno del mundo, en las Finales ATP de 2019, pero este sábado controló el partido con autoridad, con un tenis variado y una excelente protección de la red.
Se regaló su segundo triunfo ante un número uno del mundo en los últimos once intentos, en los que tenía un balance de 1-7 ante el serbio Novak Djokovic y de 0-3 ante el español Rafa Nadal.
Y eso que su partido empezó con una rotura en contra en el primer juego. Sin embargo, eso no le hizo perder confianza y Tsitsipas recuperó el 'break' en el sexto juego para forzar el desempate, en el que anuló una bola de set antes de imponerse por 8-6.
Incluso en la segunda manga, cuando Medvedev, campeón este año en Los Cabos, reaccionó con rabia, Tsitsipas logró mantenerse en el partido y estuvo a punto de remontar un 1-5.
Pese a perder 6-3 ese set, en el tercero mantuvo el mando de las operaciones con carácter, al tiempo que Medvedev perdió lucidez, profundamente fastidiado por el ruido que llegaba a la pista central por unos fuegos de artificio lanzados en un cercano parque de diversión.
Es algo habitual en Cincinnati el viernes y el sábado a las 22.00 locales, pero Medvedev protestó con rabia al juez y acabó entregando su saque con el 3-2 en el luminoso, lo que abrió el camino a Tsitsipas hacia la victoria.
El griego celebró su victoria con un pequeño baile mirando hacia su cuerpo técnico y se jugará este domingo el segundo Masters 1.000 de su carrera.
Se enfrentará a un Coric al que ganó en 2018 en Roma, antes de rendirse en 2020 en el Abierto de Estados Unidos.
Coric, número 152 del mundo, se convirtió en el jugador con ránking más bajo capaz de alcanzar la final del Masters 1.000 de Cincinnati, tras doblegar al británico Cameron Norrie en las semifinales.
Solo el rumano Andrei Pavel, que fue finalista en París en 2003 siendo el número 191 del mundo, alcanzó el último acto de un torneo 1.000 con ránking más bajo que Coric.
Entrado en el cuadro principal de Cincinnati con ránking protegido, Coric está jugando un tenis de altísimo nivel en el Lindner Family Tennis Center y eliminó esta semana a los españoles Rafa Nadal y Roberto Bautista y el canadiense Felix Auger Aliassime, antes de Norrie, número 11 del mundo.
Con este triunfo, ya está seguro de alcanzar la posición número 48 en el ránking mundial este lunes, pero con una victoria en la final se colocaría en la vigésima novena posición.