Brilló por encima del resto el cuarto partido de la serie Kings-Warriors, en el que los defensores del anillo salvaron los muebles gracias un un fallo de un ex, poco después de un fallo garrafal de su propio líder. Además, los Timberwolves eludieron la barrida y Celtics y Knicks se colocan con 'match-ball'.
Un tiempo muerto pedido por Stephen Curry (32 puntos, 5 rebotes y 4 asistencias), que los Warriors ya no tenían, estuvo a punto de costar un disgusto a los locales, que en ese momento, a falta de 42 segundos, dominaban por 126-121 y tenían el balón. El error se tradujo en un libre anotado por Malik Monk y un posterior triple de De'Aaron Fox (38 tantos, 9 rechaces y 5 pases letales).
Curry volvió a errar, esta vez un 'floater' desde 3 metros, y le dejó 10 segundos al rival. En la posesión final defendió bien a Fox, quien dobló a Harrison Barnes, pero el triple liberado del exwarrior –miembro del plantel que ganó el anillo en la 2014/2015– no encontró la red.
Un final de infarto para un duelo con una primera mitad desenfrenada (65-69) y una segunda donde las defensas hicieron acto de presencia. La de los vigentes campeones lo hizo con especial efectividad en el tercer corte (37-23) y en los minutos finales, donde el trío arbitral, hasta ese momento muy protestado por ala fición local y por los jugadores de Steve Kerr, obvió todo lo (mucho) que pasó en ambas pinturas.
Jordan Poole (22 puntos) y Klay Thompson (26) completaron la fuerza aérea de los Warriors, con Kevon Looney (8, 14 rechaces y 6 asistencias) y Draymond Green (12, 10 y 7) en brillantes labores de intendencia.
El rookie Keegan Muray (23 -5 de 7 en triples- y 7 capturas), Malik Monk (16, 5 y 5 asistencias) y Domantas Sabonis (14, 7 y 8) fueron los socios preferentes de Fox. El lituano, dominante en el poste bajo antes del descanso, se difuminó en la segunda mitad, cuando Looney le hizo jugar más alejado del aro.
Más polarizada estuvo la anotación en el triunfo (114-108, tras prórroga) de los Wolves ante los Nuggets. Anthony Edwards (34 puntos, 6 capturas y 5 pases letales) tiró del carro local y Nikola Jokic (43, 11 y 6) lo hizo del visitante, que forzó el tiempo extra con un parcial final de 0-12.
Edwards, frenado por Kentavious Caldwell-Pope en la última posesión de Minny en el tiempo reglamentario, se resarciría en la prórroga con un triple que puso un imbatible 112-108 a 11 segundos del final. Los de Chris Finch se salvaron así del segundo KO por la vía rápida de estos playoffs.
A punto de besar a lona están los Cavs tras perder por 102-93 contra unos Knicks que volvieron a exhibir una muy buena defensa.
Pese al desastroso partido desde el arco (6 de 23) y de Donovan Mitchell (11 puntos, con 5 de 18 en tiros de campo), los visitantes contaron con otros 5 jugadores en dobles dígitos, con Darius Garland (23 y 10 pases de canasta) a la cabeza, lo que les permitió llegar con vida al tramo final.
Y ahí aparecieron RJ Barrett (26 tantos) y Jalen Brunson (29, 6 rebotes y 6 asistencias) para reventar a los de JB Bickerstaff –que volvió a prescindir Ricky Rubio–, con la inestimable colaboración de Josh Hart, autor de 19 puntos y 7 rebotes, los dos últimos en ataque, a los que Brunson (triple) y Barrett (suspensión desde 3 metros) le pusieron rúbrica y con ello certificaron el triunfo.
Los Jays se repartieron a partes iguales 62 de los 129 puntos que los Celtics anotaron en Atlanta, donde encajaron 121, colocándose así con un 'match-ball' que afrontarán en Boston.
Brown, que estaba jugando con una máscara protectora, se hartó de ella en el segundo cuarto, cuando estaba en 1 de 7 en tiros de campo. A partir de ahí, 11 de 15. Tatum sumó 7 rebotes, 4 pases de canasta y 3 tapones a sus 31 puntos.
Derrick White (18 tantos, con 4 de 9 en triples), Marcus Smart (19), Malcolm Brogdon (14, 4 rebotes y 4 asistencias) y Robert Williams (13, 15, 3, 2 robos y 2 tapones) complementaron el trabajo de la dupla de líderes, mientras que los Hawks quedaron reducidos a un trío: DeAndre Hunter (27 y 7 capturas), Trae Young (35 y 15 pases letales) y Dejounte Murray (23, 6 y 9 rebotes). Arañanado un triunfo han cumplido.