En el primer partido de la final del Oeste naufragaron antes del descanso y acabaron acariciando una gran remontada. El segundo lo tuvieron en la mano y se lo arrebató Jamal Murray con un asombroso cuarto final. Los Lakers aprietan pero son los Nuggets los que ahogan (108-103).
Gris en los tres primeros cuartos (14 puntos con 5 de 17 en tiros de campo), el base canadiense explotó en el momento de la verdad: 23 tantos (6 de 7, incluyendo 4 triples), uno menos que los Lakers. Es su cuarto último periodo en partidos de playoffs por encima de 19 puntos, la mejor marca de un jugador en los últimos 25 años.
Los de Darvin Ham decidieron defender desde el principio, y así llegaron al descanso con ventaja (48-53), a pesar de que Nikola Jokic amenazaba ya con un triple-doble que acabaría consiguiendo (23 tantos, 17 rebotes y 12 asistencias). El cuarto seguido, el quinto en los seis últimos partidos.
La igualdad se mantuvo tras el tercer periodo (76-79). Y Murray tomó el testigo del serbio, que en los 12 minutos finales se quedaría a cero (0 de 4 en el tiro). Con un triple puso a los Nuggets por delante (84-83) por primera vez desde el 27-25 de finales del primer acto. Cinco minutos después el parcial era de 15-1, con tres triples del canadiense, uno de Bruce Brown (12 tantos) y otro de Michael Porter (16 y 7 capturas).
Los Lakers resucitaron con un 0-7 cocinado entre Anthony Davis (18 puntos, 14 rechaces, 4 asistencias y 4 tapones) y LeBron James (22, 9, 10, 2 y 4 robos) e incluso llegaron a colocarse a rebufo (101-99) con un triple de Austin Reaves (22 tantos –5 de 9 desde el arco– y 5 pases letales) a 67 segundos para el final. Una bandeja errada por LeBron quemó el último cartucho visitante y Murray cerró su show con 7 libres convertidos para acabar el partido con 37 puntos, 10 rebotes, 5 asistencias y 4 robos.
Dos interesantes esbozos de los Lakers, que dispondrán de los dos próximos partidos en casa para intentar rematar lo que parece un cuadro interesante y así dar vida a la serie. Pero para ello necesitarán mejores prestaciones de su pareja de bases. D'Angelo Russell firmó 10 puntos, con 3 de 8 en el tiro, y Dennis Schröder sólo 4 (2 de 9).
Stephen Curry, tercero en la votación del premio al Mejor Compañero, ha sido galardonado con el J. Walter Kennedy Trophy, que concede la Asociación de Escritores de Baloncesto Profesional (PBWA) al jugador, entrenador o preparador físico que haya destacado por su servicio y dedicación a la comunidad. Wenyen Gabriel (Lakers), Paul George (Clippers) y Grant Williams (Celtics) fueron los otros finalistas.