El Río Breogán demostró que cree en el sueño de jugar la Copa del Rey, en la posibilidad de hacer historia, y acaricia el billete a la competición que se celebrará en Granada después de haberse reencontrado con la victoria (89-83) ante un rival directo, el Bitci Baskonia, que se ha complicado la clasificación para ese torneo.
Una victoria el domingo en el derbi gallego con el Monbus Obradoiro, daría matemáticamente la clasificación a los breoganistas, pero también con una derrota la tienen en su mano porque el Baskonia tendría que remontarles 61 puntos de ‘basketaverage’ para poder adelantarles en la clasificación.
Los minutos de locura que tuvo el encuentro, con el bosnio Dzanan Musa una vez más como faro del conjunto lucense (26 puntos, 36 de valoración), favorecieron al Breogán, que se aprovechó de un mal final de tercer cuarto y también de un gris arranque del último de su adversario para avanzar hacia el objetivo doble de la permanencia y la Copa.
Para confirmar su presencia en una competición a la que, en teoría, no estaba invitado el recién ascendido a la Liga Endesa, tiene por delante el derbi gallego con el Monbus Obradoiro en Santiago de Compostela, mientras que el Baskonia se jugará sus últimas opciones ante el Hereda San Pablo.
El Breogán arrancó con seis puntos de Mahalbasic, pero el Baskonia le replicó con los triples de Granger, que anotó también de dos, y de Peters para ponerse por delante (6-8, m.3). Enseguida se fueron siete arriba (8-15, m.5) con otro lanzamiento de Baldwin desde 6,75.
Los lucenses neutralizaron esa primera brecha también con triples, principalmente, los de Kalinoski, Musa e Iván Cruz (19-19, m.9), pero otro de Baldwin dejó en cinco la renta de los vitorianos en el primer cuarto (19-24).
Empezó del mismo modo el segundo, en este caso con el acierto de Fontecchio para poner la máxima renta hasta entonces para el Baskonia (19-27), pero el Breogán, a remolque, estrechó de nuevo la distancia (24-27, m.12) en un ida y vuelta que volvió a situar a los visitantes a siete (28-35, m.14), y otra vez a los locales a dos (35-37, m.15) con Musa como referente.
El internacional bosnio, al cántico de MVP en el Pazo, completó la remontada (41-40, m.17), ya con 16 puntos a esas alturas de partido. El encuentro, desenfrenado, llegó al descanso con los gallegos al frente (50-47).
El Breogán tuvo un apagón en ataque de casi tres minutos a vuelta de pausa, hasta que Musa, atento, robó y anotó. El mando en el marcador pasó al lado del Baskonia. Granger cogió la onda y abrió una mínima renta de cuatro puntos, pero Enoch concedió la tercera falta. Más minutos desatados, con acierto y desatino, y otra vez los lucenses delante (63-61, m.28).
Tres puntos, todos de tiro libre, en los últimos cuatro minutos del tercer periodo, frenaron a los vascos. Los gallegos, con la aportación de Iván Cruz y un lanzamiento de dos de Bell-Haynes sobre la bocina, entraron al último cuarto siete arriba (69-62).
Los locales, con los nervios más templados, encaminaron la victoria con una ventaja de trece puntos a falta de poco más de seis minutos (78-65).
Baskonia apretó en la recta final del partido y tuvo la opción de ponerse a cuatro con un triple de Peters (84-76, m.38) que no entró. Costello y Baldwin le dieron emoción con efectividad en tiros libres (85-80, m.39), pero una recuperación de Musa frenó a los vitorianos y los lucenses celebraron un triunfo que les acerca al sueño de la Copa.
BREOGÁN 89 - 83 BASKONIA |
Breogán (19+31+19+20): Bell-Haynes (7), Musa (26), Lukovic (4), Mahalbasic (14), Sergio Quintela (5) –cinco inicial– Kacinas (3), Kalinoski (15), Sakho (2), Erik Quintela (2), Cruz (11). baskonia (24+23+15+21): Baldwin (16), Granger (12), Enoch (17), Peters (9), Giedraitis (4) –cinco inicial– Sedekerskis (3), Fontecchio (6), Costello (10), Arturs Kurucs (7). árbitros: Calatrava, Caballero, Sánchez. |