Por tercer Mundial consecutivo España continúa en la ola, este sábado conquistó la medalla de bronce ante Serbia (6-9), en un partido en el que la defensa y, especialmente, el meta Edu Lorrio marcaron la diferencia.
No pudo reeditar meterse en la final, después de un final de película de miedo ante Hungría, pero los de David Martín suman un bronce a la medalla de oro del pasado verano en el Mundial de Budapest y la plata de 2019 en Gwangju.
España dejó su portería a cero durante dieciocho minutos. Cuando más apretaban los serbios (5-6) al descanso, apareció la defensa y, especialmente Lorrio. El meta, a la sombra de Unai Aguirre durante todo el torneo, firmó una actuación impresionante, con un porcentaje de acierto del 68%, paró trece de los diecinueve remates de los balcánicos.
Y eso que después del bajón psicológico que supuso la derrota en semifinales ante Hungría en el último segundo, a España le costó entrar en materia.
De salida parecieron los serbios más metidos en el partido. Más intensos. Los balcánicos, en plena reconstrucción, se encontraron con la posibilidad de luchar por el bronce, después de que en semifinales los griegos no le dieron ninguna opción y no querían desaprovechar la ocasión.
Y España sufrió al principio. Empezó por debajo en el marcador, con un tanto de Strahinja Rasovic, el máximo goleador del torneo, se rehízo con dos tantos de Álvaro Granados y de Alex Bustos, en dos superioridades. Pero al término del primer cuarto todo estaba equilibrado (3-3), con otro tanto de Rasovic.
Los de David Martín tenían que reponerse anímicamente, pero también a la dureza que impusieron los serbios en la piscina. En el segundo cuarto, Tahull puso el 3-4 para España y Jaksic equilibró el partido.
En el duelo de goleadores del Neo Beograd, entre Granados y Rasovic, el español equilibró la balanza con dos tantos consecutivos, el último de penalti, para darle el 5-6 a los de David Martín en el descanso.
Edu Lorrio, sustituto hoy de Unai Aguirre, tuvo un papel destacado en el despegue de España en el marcador en el tercer tiempo. Cuatro intervenciones del meta del Sabadell, una de ellas en un tiro del boya, dieron aire a los de David Martín.
El parcial llegó al 0-3, con dos buenos tantos de Munárriz, de lanzamiento, y de Perrone. El tanto del capitán resume el juego alegre de los españoles, con un robo, una acción en transición y el 5-8.
La defensa y la portería marcaron la diferencia en este tercer cuarto y a ocho minutos del final, España lo tenía todo a su favor para llevarse el partido y la medalla de bronce y no falló.
Firmó un último cuarto inmaculado. Anotó un tanto Felipe Perrone (5-9) y solo encajó un gol, a cinco segundos del final, y por intervención del VAR para el 6-9 final.
El próximo año será determinante para el futuro olímpico del equipo. Necesita clasificarse para los Juegos de París y tendrá dos oportunidades para ello, una en enero en el Europeo de Netanya (una plaza para el campeón) y la otra (con dos plazas en juego) en el Mundial de Doha del próximo febrero.
Ficha técnica |
6 - Serbia: Mitrovic; Radulovic (-), Rasovic (3), Drasovic (), Jaksic (1), Jankovic (-), Vucinic (-) -equipo inicial-, Milojevic (2), Randelovic (-), Lazic (-) y Ubovic (-). |
9 - España: Lorrio; Munárriz (1), Granados (3, 1p), de Toro (-), Larumbe (-), Famera (-), Perrone (2) -equipo inicial-, Sanahuja (1), Cabanas (-), Tahull (1), Mallarach (-) y Bustos (1). |
Parciales: 3-3, 2-3, 0-2, 1-1. |
Árbitros: Ohme (GER) y Colombo (ITA). Eliminados: Famera, Drasovic, Ubovic, Jankovic y Sanahuja. |