Una final inesperada, entre dos jugadores inicialmente al margen de los elegidos para salir con éxito del torneo echará el cierre a la vigésima segunda edición del Masters 1000 de Madrid que coronará al ruso Andrey Rublev, séptimo favorito, o el canadiense Felix Auger Aliassime.
Durante dos semanas la Caja Mágica ha contemplado jornadas emotivas, partidos cerrados, estrenos, despedidas, retiradas... eventualidades que han mantenido en alerta uno de los mejores eventos de la temporada, en un año intenso, con las aspiraciones olímpicas en el horizonte que han condicionado, en parte, el día a día de los jugadores y el torneo.
Ni Andrey Rublev, un jugador de talento con altibajos emocionales habitualmente anclado justo antes de los momentos estelares de los grandes eventos y, mucho menos, Felix Auger Aliassime, un diamante en bruto, venido a menos y arrinconado hasta ahora en un espacio trivial del circuito y la temporada, aspiran a la gloria de la tierra batida de Madrid.
El moscovita, de 26 años, componente de una brillante camada rusa que comparte con jugadores como Daniil Medvedev o Karen khachanov, vuelve a la escena principal de un reputado torneo. Su bagaje es amplio. Ahora octavo del mundo, llegó a ser quinto del mundo. Si gana el domingo será el sexto mejor del circuito ATP.
Su historial cuenta con veinticuatro finales antes de la de Madrid. Este 2024 solo salió vencedor en Hong Kong, pero en el 2023 se coronó en el Masters 1000 de Montecarlo, su mayor logro por ahora.
No fue aquella su única final en un evento de este rango. Ha perdido tres. Una anterior en el Principado, en el 2021, cuando también sucumbió en el de Cincinnati,y en el 2023, la más reciente, la de Shanghai.
Madrid será la quinta final Masters 1000 para Andrey Rublev, que solo ha ganado una y que ha roto su barrera en la Caja Mágica. En las tres ediciones anteriores, en las que formó parte del cuadro principal, su techo estaba en los cuartos de final que logró en el 2022. El griego Stefanos Tsitsipas frenó su paso a semifinales.
Llegó a Madrid con cuatro derrotas seguidas (Indian Wells, Miami, Montecarlo y Barcelona), un puñado de dudas y más recelos sobre su actitud. Un altercado con un juez de línea en el torneo de Dubai le constó la descalificación. Su imagen se deterioró. No ha dado esa imagen en la Caja Mágica, donde se convirtió en el verdugo de uno de los ídolos locales, Carlos Alcaraz, al que batió, tras remontar, en cuartos de final. Antes, el moscovita había superado, uno tras uno, al neerlandés Tallon Griekspoor, al español Alejandro Davidovich y al argentino Facundo Bagnis.
En semifinales se deshizo con solvencia, un gran tenis y una destacada estabilidad del estadounidense Taylor Fritz. Ahora espera a Auger Aliassime, con el que se ha enfrentado en seis ocasiones y un balance favorable. Solo en una ocasión, en Rotterdam en el 2022, salió vencedor el norteamericano. Las otras cinco, incluida la única en arcilla, en el 2018 en Umag, y la más reciente, este curso, también en Rotterdam, los ganó el ruso.
"Todos nuestro partidos fueron complicados, un drama, casi siempre en tres sets e igualados. El último fue en Rotterdam y no se cuantos puntos de partido salvé", recuerda Rublev del canadiense.
Felix Auger Aliassime se encuentra en la final casi de forma inesperada. El primer sorprendido en verse a un paso del título, en el partido más importante de su carrera, por vez primera ante la posibilidad de ganar un torneo de categoría Masters 1000, es este jugador nacido en Montreal hace 23 años que disparó su proyección con las semifinales alcanzadas en el Abierto de Estados Unidos del 2021, o las de Miami tres años antes.
Llegó el norteamericano a ser el sexto jugador del mundo, en noviembre del 2022, pero ahora ha caído hasta el 35. Más recordado por las finales perdidas, nueve, que por sus títulos, cinco, no levanta un trofeo desde Basilea, en la temporada pasada. Lejos está de su mejor temporada, la del 2022, cuando acaparó sus cuatro primeros títulos, en Rotterdam, Florencia, Amberes y Basilea. Todos en pista dura. Sus mejores momentos en arcilla fueron al principio de su carrera, en Lyon y Rio de Janeiro, donde fue subcampeón.
Ahora está ante el momento más importante. "Es una oportunidad increíble para poder ganar el torneo, aunque no es la mejor manera", dijo Felix tras el abandono, lesionado, del checo Jiri Lehecka.
Disfruta de su quinta presencia en la Caja Mágica y nunca había pasado de los cuartos de final que obtuvo en el 2022, eliminado por el alemán Alexander Zverev. Después, no pasó del primer partido.
Se ha visto beneficiado Auger Aliassime de los contratiempos que han perseguido a sus adversarios. Sobre todo en el tramo final. Llega al último partido casi sin desgaste. Eliminó en la primera ronda al japonés Yoshihito Nishioka y después al francés Adrian Mannarino. En tercera ronda tumbó al checo Jakub Mensik, pero su gran triunfo llegó en octavos, cuando, en dos sets, se deshizo del quinto favorito y finalista en los dos últimos eventos de tierra, campeón en Barcelona y finalista en Montecarlo, el noruego Casper Ruud.
Y después llegó el llano. Jannik Sinner, en las semifinales contra el checo Jiri Lehecka solo jugó cuatro juegos. El europeo se dañó en la espalda y abandonó al cuarto de hora de partido.
El jugador de Montreal es el segundo peor clasificado ATP que llega a la final de Madrid, solo por detrás del alemán Jan-Lennard Struff (65) el año pasado.
Mientras el torneo femenino tiene cara a cara por el título a las dos mejores tenistas del mundo, del momento, el masculino tendrá un nuevo vencedor. Un jugador sin éxitos de este calibre u otro más habitual que pretende en Madrid el impulso definitivo para consolidarse en las alturas del circuito.