Será de oro o de plata, pero Carlos Alcaraz ya tiene su medalla olímpica, la séptima para el deporte español en siete días de los Juegos (ocho con la del boxeador Ayoub Ghadfa). El príncipe del tenis mundial levita sobre la tierra de la Philippe Chatrier. Por algo es el vigente campeón de Roland Garros. No da ni una opción a Felix Auger-Aliassime. Juega a otra velocidad y le arrolla por un doble 6-1. El domingo volverá a la pista central para disputar la final contra Novak Djokovic, un hombre en una misión, ganar el oro olímpico que no tiene en su legendario palmarés.
Alcaraz recupera la frescura que perdió por la fatiga dle dobles. Presiona con su prodigiosa derecha desde el principio. Sufre el canadiense, que entrega pronto su saque con una doble falta. El español hace daño sobre el débil revés de su rival, domina al servicio y aprieta con el resto: una dejada, un passing y otro punto de rotura. No aprovecha el primero, pero tiene uno más y Auger-Aliassime la tira a la red. 4-1.
El norteamericano se rebela (15-30) pero Carlitos cierra otro servicio con dos toques de genio: una dejada marca de la casa y una volea acrobática que parecía imposible. Ruge la Chatrier con su nuevo ídolo. El español saca del partido a su rival, lo mueve del fondo a la red y lo remata a placer para cerrar con su tercer break consecutivo el primer set. 6-1.
Auger-Aliassime no tiene respuesta para la derecha de Alcaraz, unas veces plana y al ángulo, otras liftada con un bote alto e incómodo. Manda el español, que vuelve a romper el saque en el tercer juego de la segunda manga. Y una vez más en el sexto. No falla al servicio pese a una doble falta con punto de partido. Sentencia en el siguiente y ya está en la final.
A sus 21 años jugará por su primera medalla en los Juegos Olímpicos, el oro, nada menos. Tras la amarga despedida del miércoles junto a su ídolo de la infancia y efímero compañero en el torneo de dobles, el mito Nadal, Carlitos asume el relevo en el tenis mundial. Como Rafa en 2008 y Steffi Graff en 1988, tiene a tiro un complicado reto: ganar Roland Garros, Wimbledon y el oro olímpico en el mismo año.
“Voy a intentar no pensar en todos los datos y la estadística de lo que puedo llegar a conseguir para dar lo mejor y hacer disfrutar y sentirse orgullosos a todos los españoles”, declara Alcaraz, sin vértigo ante la posibilidad de unirse a “dos leyendas”.
Otra leyenda, Djokovic, volverá a cruzarse con Carlitos en una incipiente rivalidad desfasada en su línea temporal. El serbio lidera la carrera por el GOAT con 24 títulos del Grand Slam (22 de Nadal y 20 de Federer). El español tiene cuatro y toda una carrera por delante. En el cara a cara hay empate: tres victorias para cada uno. La última, de Alcaraz en la final de Wimbledon. En tierra, el único precedente es en las semifinales de Roland Garros 2023, con triunfo de Nole.