El K4 500 metros, formado por el betanceiro Carlos Arévalo, Saúl Craviotto, Marcus Cooper y el también gallego Rodrigo Germade, séptimo clasificado en el reciente Campeonato del Mundo de Duisburgo (Alemania), se desquitó con una medalla de plata en la prueba de la Copa del Mundo que sirve de test para los Juegos Olímpicos de París 2024.
Los subcampeones olímpicos pasaron a la final en el estadio náutico de Vaires-Sur-Marne con la tercera plaza de la semifinal, en la que no salió la embarcación alemana, campeona en Tokio 2020 y mundial hace sólo unos días. Con el pase ya asegurado, el cuarteto germano prefirirío no forzar.
En la final, Arévalo y sus compañeros acabaron segundos con un crono de 1:21.41, a tan solo 25 centésimas de los ganadores, los húngaros Bence Nads, Kolos Csizmadia, Istvan Kuli y Sandor Totka, subcampeones en Duisburgo. Dinamarca completó el podio a ocho centésimas de los españoles.
Por su parte, el K4 500 femenino de Sara Ouzande, Estefanía Fernández y las gallegas Carolina García y Teresa Portela, bronce en Duisburgo, no pudo esta vez subir al podio. Pasaron a la final como terceras de su serie y en la regata definitiva fueron sextas con un tiempo de 1:37.53, a tres segundos del podio que cerró Alemania tras China y Nueva Zelanda.
Tampoco pudieron repetir medalla las subcampeonas del mundo de C2 500, la también gallega Antía Jácome y María Corbera, séptimas en la final que ganaron las chinas Shixiao Xu y Mengya Sun.