Un equipo ligado al Deportivo, ya que fue su primera gran víctima en competición europea, está de moda tras derrotar al Bayern en la Champions. El Aston Villa ha vuelto a la élite del fútbol continental después de casi una década de sinsabores.
En octubre de 2018, hace solo seis años, los ‘Villanos’ ocupaban la decimosexta plaza en el Championship, la segunda división inglesa. Habían bajado en 2016 al cabo de una desastrosa campaña cerrada con un pírrico balance de tres victorias y 17 puntos. Dos multimillonarios, el norteamericano Wes Edens y el egipcio Nassef Sawiris, compraron el 55% del club al chino Tony Xia en el verano de 2018. Edens, copropietario de los Milwaukee Bucks de la NBA desde 2014, sabía bien dónde se metía, aunque el negocio comenzó lejos de funcionar bien. Sin embargo, solo cinco derrotas en las últimas 31 jornadas de una maratoniana liga de 46 partidos, con una racha de diez victorias en el tramo final, le llevaron al playoff. Allí batió en la tanda de penaltis al West Brom y en la final al Derby County. Acto seguido, Edens y Sawiris se hicieron con el cien por cien del accionariado.
Pese a su rica historia, el Aston Villa está habituado a los vaivenes en las últimas décadas. Fue campeón de Europa en 1982, siete años después de ascender a la vieja Division 1, a la que volvió a caer cinco más tarde. Ascendió de inmediato, en 1988, y en 1993 peleó por la Premier hasta la línea de meta con el Manchester United. Poco después se cruzó en la Copa de la Uefa con el Dépor, que ahora tiene a los ‘Villanos’ como un espejo más en el que mirarse.