Siempre que escucho hablar de los puntos que debe sumar un equipo en el torneo liguero para cumplir los objetivos marcados me acuerdo de un profesor que tuve en los años que cursé el BUP, lo que ahora se conoce como secundaria o, sencillamente, la ESO.
El hombre impartía la materia de Matemáticas y entre explicación y explicación del temario nos hablaba de la importancia de los números en la vida cotidiana. Mis compañeros y yo escuchábamos en silencio y cuando acababa la clase iniciábamos un debate en el que valorábamos las ventajas de escoger Ciencias o Letras al llegar a Tercero y de esta manera encaminarnos a la carrera universitaria que teníamos en mente cursar al finalizar el COU. En una de las muchas explicaciones que nuestro maestro nos dio, un día nos cuestionó cuál sería el número que debía resultar si en la primera de las ‘X’ partes programadas era ‘Y’.
Viene esta pequeña introducción para poner en el foco que el campeonato liguero de la Segunda División alcanzó este fin de semana la sexta jornada de las cuarenta y dos programadas, concluirá hoy con el encuentro que protagonizarán los equipos del Huesca y Córdoba en El Alcoraz a partir de las ocho y media de la tarde. Esto supone que el torneo de la regularidad ha completado la primera de las siete partes en las que se puede dividir y tras la misma el Real Club Deportivo contabiliza en su casillero cuatro puntos tras ganar un partido, empatar otro y perder los cuatro restantes. Si alguien hiciese la cuenta de la lechera le daría que a la conclusión de la temporada el RCD obtendría 28 puntos, una cifra que impediría continuar en la categoría de plata estatal al término de la presente temporada. Pero uno no debe caer en el alarmismo y estoy convencido de que el Dépor hará bastantes más puntos que esos mencionados 28 para conseguir la salvación con suficiencia.
Creo, y lo escribo desde la sinceridad, que la fortuna ha sido esquiva con la primera plantilla blanquiazul desde el inicio de la competición y esta circunstancia es algo pasajera. El equipo, como se ha podido ver el pasado sábado en el encuentro celebrado en el Estadio de Riazor ante el Burgos, domina buena parte de sus enfrentamientos y crea ocasiones delante de la portería rival. Sin embargo su falta de acierto le pasa factura y por ello se encuentra en estos momentos en las posiciones de descenso.
Queda mucho camino por recorrer –36 jornadas– y como afirmó Lucas Pérez al final del duelo ante los castellanos, “esto acaba de empezar y lo sucedido nos va a hacer más fuertes. Ahora no están saliendo las cosas, (pero) el sol siempre sale”.
Lo dicho por el capitán es la mentalidad existente dentro del vestuario de Imanol Idiakez. Con este ánimo el Deportivo irá a más a medida que pasen los partidos y así cogerá el impulso necesario que le permita situarse en el lugar que le corresponde en la tabla clasificatoria. Nadie lo duda: ni el cuerpo técnico, ni los jugadores ni la afición. Por ello, tengo claro que esto volverá a verse en el próximo encuentro que protagonice el RCD, que será este viernes a las ocho y media de la tarde en el Carlos Belmonte ante el Albacete. De esta forma se conseguirán sin más demora los primeros tres puntos como visitante en la presente temporada 2024-25.
