Sabor agridulce para el Silva en el primer partido de 2024, en el que estuvo por delante en el marcador ante el Rápido  prácticamente todo el partido, pero no supo sentenciar y, a falta de diez minutos para el final, Cellerino neutralizó, en una acción de contraataque, el tanto inicial de Lema.

El conjunto de Iván Sánchez entró mucho mejor al partido que el Rápido, con Víctor Rodríguez como entrenador reemplazando a un Rafa Sáez que dejó el club después de la última derrota en 2023 ante el Estradense en casa: 0-3. El Silva no sólo se adelantó prácticamente empezar el choque sino que tuvo ocasiones para ampliar la ventaja.

El primer gol de la mañana en A Grela llegó tras un cambio de orientación desde la banda izquierda buscando la entrada de Brais Lema, que le pegó a la pelota desde el costado metiendo el cuero entre las piernas de un Brais Pereiro que pudo hacer más para evitar el 1-0.

A partir de ahí, el Silva consiguió encontrar varias situaciones de contraataque muy peligrosas en las que los futbolistas de ataque del cuadro coruñés no decidieron bien y no consiguieron resolver para aumentar la ventaja en el marcador. Al Rápido de Bouzas le costó adaptarse al partido pero lo hizo a partir del minuto 20. El cuadro vigués se hizo con el control del juego, movió la pelota de lado a lado y consiguió meter al Silva cerca de su área sacando varios centros laterales pero sin generar ocasiones claras de gol, por lo que se llegó con el 1-0 al descanso.

En el segundo tiempo, el guión del partido fue el mismo, con el Rápido amasando continuamente la pelota, moviéndola de lado a lado y, quizá, mostrándose con un tono físico superior, pero en el 70 fue Pablo Carro el que tuvo la ocasión más clara con un mano a mano que resolvió bien Brais Pereiro.

Poco después, en una contra del Rápido, el balón llegó a la banda y de ahí salió un pase de la muerte para un Cellerino que no perdonó.